Cree que no será fácil olvidar estas navidades; que su presencia en el elenco del musical "Jesucristo Superstar" ha ampliado sus miras artísticas de cara al futuro. Cantante con varios registros en el género dance y house, la tejinera Míriam Reyes es María Magdalena en el espectáculo que se representa en la Sala Sinfónica del Auditorio de Tenerife hasta el próximo martes.

Míriam Reyes entró en el elenco a través de las pruebas de selección. "Me preparé un tema y fui con la intención de aprovechar esta oportunidad", cuenta sobre los filtros que se hicieron para armar el reparto. "Fue una audición emocionante en la que ya se veía que esta iba a ser una experiencia importante", asegura la intérprete lagunera.

Reyes ha tenido que ampliar su talento musical -su voz llama la atención por una calidez- con un aprendizaje ultrasónico de coreografía e interpretación. "Mi experiencia en el teatro es corta o casi nula y el baile tampoco es algo que se me dé demasiado bien, pero aquí he encontrado una manera de combinar la música con esas facetas", precisa respecto a un rol que ha descubierto a una Míriam distinta. "No creo que vaya a cambiar nada de lo que he hecho hasta ahora, pero sí que me gustaría repetir en algún que otro musical... Espero tener la oportunidad de participar en proyectos similares porque me lo estoy pasando realmente bien", declara una artista que será protagonista en los próximos carnavales de Santa Cruz de Tenerife. Y es que Míriam Reyes interpretará un tema -fruto de una colaboración entre MD Danza, Oye Producciones y Menos es Más Comunicación- que se promocionará en las próximas fiestas de invierno. Esta no es la primera vez que Reyes se enfrenta a la audiencia de la Sala Sinfónica del Auditorio de Tenerife, aunque sí que lo hace en unas condiciones completamente diferentes a las que vivió en un certamen de rondallas en el que participó con el coro de la Masa Coral Tinerfeña. "Sí que intimida verte en el escenario, pero en aquella ocasión los aplausos no eran solo para mí... Aquí me toca uno de los papeles principales y eso se nota por las reacciones del público", declara una joven que admite tener unas creencias religiosas, aunque tampoco es demasiado practicante. "Durante la función hay momentos significativos en los que miro a la cara de Jadel y creo estar delante de Jesucristo", revela sobre la buena caracterización de su compañero de reparto.

Pero ese no es el único instante emotivo de este clásico. "En mi personaje existen dos mujeres: una es María como madre de Jesús y la otra es Magdalena como ser que se siente atraído por la figura de Cristo. No se trata de un enamoramiento carnal, sino de una fascinación por el personaje que se aprecia en algunas de mis interpretaciones", sostiene una artista que se considera una afortunada por estar disfrutando desde dentro un musical que ha generado un gran compañerismo entre los actores y actrices. "La experiencia de trabajar en un equipo dirigido por Jaime Azpilicueta aporta conocimientos en cada uno de los ensayos. Nos pasamos el día en el Auditorio, pero ha valido la pena invertir todo ese tiempo", concluye Míriam Reyes.