El cineasta tinerfeño Eduardo Cubillo y su equipo de La Gaveta Producciones acaban de regresar de Luisiana con más de veinte horas de grabación bajo el brazo, material que utilizarán para el montaje del documental "Isleños. Una raíz de América", en el que contarán la historia de los canarios que viajarán al citado estado norteamericano en el año 1777 y sus descendientes.

Este joven realizador, autor de la película "Cubillo, historia de un crimen de Estado" y ganador con un corto rodado en inglés del premio al mejor director en el Festival Internacional For The Fallen Film Challenge 2014, se ha quedado sorprendido de los estrechos vínculos con Canarias existentes entre los herederos de aquella generación de isleños, orgullosos de sus antecesores.

Cubillo explicó que la película que espera realizar, con una hora de duración, "describirá la apasionante historia de los descendientes de dos mil familias canarias que navegaron hasta Luisiana en 1777 para reforzar las defensas de la colonia española y que se asentaron a las afueras de Nueva Orleans. Tras la independencia americana, y ya ciudadanos estadounidenses, tuvieron un papel esencial en la guerra contra los ingleses en 1812, batalla que se recreará en el documental con más de dos mil figurantes".

Los diferentes contactos que mantuvieron con diversas personalidades en aquel país, entre ellos algunos historiadores, los llevó a descubrir cómo esta comunidad se mantuvo aislada durante dos siglos, tiempo en el que practicaron la endogamia, además de defender su identidad isleña. "Se da el insólito fenómeno de que ellos preservan la cultura, la lengua y las tradiciones tal como eran en Canarias en el siglo XVIII".

Al parecer, hasta finales de los años 70, los isleños perdieron el recuerdo de su origen, a pesar de que eran conscientes de la singularidad de su lengua y sus diferencias con los demás españoles. "Fue Frank Fernández, un historiador norteamericano, quien les redescubrió su historia. Así recuperaron a la madre patria y encontraron sentido a su cultura, apellidos, tradiciones y fisonomía".

Cubillo, que realizó entrevistas a una decena de personas significativas de dicha comunidad, también descubrió algunos personajes notables en el mundo de la música o la política.

"El clarinetista Alcides Núñez, que formó parte de la Original Dixieland Jazz Band, además de los Lousiana Five, que fue uno de los primeros que grabaron discos de jazz en la historia. Hablamos con un descendiente suyo que toca la tuba en la Sinfónica de Nueva Orleans. Un musicólogo nos dijo que eran los Jackson Five de la época y que marcaron una tendencia entre los primeros dixieland. Hay otro, el acordeonista José Falcón, quien grabó el primer disco de una canción cajún, cuando todavía no había nada grabado. Eran un poco las estrellas de la época. También Alver Estupiñan, que fue el primer senador de habla hispana de Estados Unidos".

El documental, que cuenta con el apoyo de la Televisión Canaria y varias empresas privadas, también incluye una entrevista con Arnold Rodrigues, un nonagenario con ascendencia canaria, que luchó con la 101 división aerotransportada durante la II Guerra Mundial. "Cuenta su papel en el desembarco de Normandía y fue uno de los primeros que entraron en el búnker de Hitler en Berlín. Es un personaje muy interesante al que volveré a entrevistar algún día para hacer un documental sobre él. También se cuentan otras batallas históricas, como las de la Guerra de Secesión".

El cineasta tinerfeño indicó que el documental "hace un recorrido desde 1815 y sus antecendentes hasta la actualidad. Es un retrato de la comunidad a lo largo de la historia. Es un retrato costumbrista de una sociedad que ha sobrevivido a la absorción de culturas de Estados Unidos, el inicio de su historia, que tiene un claro carácter bélico, y cómo ciertos personajes de la comunidad han influido en el acontecer de América".

Con respecto a sus contactos actuales con Canarias, señaló que "hicieron una expedición de descendientes a Canarias y fliparon al encontrarse con gente parecida a ellos. Inmediatamente se vieron identificados con las tradiciones. Los descendientes de los canarios que fueron allí en 1777 están orgullosos de sus orígenes. Son más canarios que nosotros. Cada uno sabe el pueblo del que vinieron sus antecesores. Hay gente en la que ambas líneas de sus ancestros vienen de Canarias y algunos incluso se han hecho análisis de sangre, me los enseñaron, y tienen ADN guanches. Ellos te dicen el primo de mi mujer es mi primo".

Son muchos los detalles que han llamado la atención de este realizador. "Los primeros alcaldes fueron canarios. Allí hay cabildos. La gastronomía tiene platos canarios, puchero o carne fiesta, que se mezclaron con la cocina criolla. Me he traído un libro de recetas".