El cantante Néstor Román, Nestakilla, trata de hacerse un hueco en el mundo del rap español con un estilo con el que busca marcar la diferencia frente a lo que impera en el país, donde cree que solo se ha promocionado hasta ahora a "los niños buenos" de este tipo de música.

"Quiero salirme un poco de lo establecido, porque el rap que se está comercializando ahora mismo es una movida muy establecida, casi cercana al pop, y los artistas que hay son las caras bonitas".

Así resume sus pretensiones en el mercado español Nestakilla en una entrevista concedida con motivo de la publicación de su primer disco de ámbito nacional, "Crisálida" (BOA Música).

Nestakilla acaba de grabar en Madrid ese trabajo como culminación a cinco años de estancia en la capital, hacia la que partió buscarse "un hueco, ampliar público y crecer como profesional y como persona", tras haberse labrado un nombre entre los seguidores de la música rap en Las Palmas de Gran Canaria, su ciudad natal.

"Como nos viene pasando desde hace muchísimos años a los cantantes canarios, y no ya en el rap, sino en muchos estilos de música, te tienes que ir, te tienes que comprar un billete de salida de aquí, aunque sea por algún tiempo", para conseguir tener proyección más allá de las islas, sostiene.

"Fue una decisión mía de, o me voy y avanzo o me quedo aquí y me quedo estancado y no tengo ninguna salida, así que hace cinco años me fui a Madrid y ahora están saliendo las cosas", relata el artista, que insiste: "Si no es por eso, igual ni saco el disco, ni avanzo, ni aprendo, sino que me quedo estancado".

Y preguntado sobre cuál es su propósito en el mercado nacional, subraya que quiere "salirse de lo establecido" y, en parte, considera que ya ha comenzado a hacerlo al sacar su nuevo disco, por entender que quienes han apostado por el buscan "la diferencia".

Diferencia que Nestakilla opina que aporta, por una parte, por el acento propio de su tierra, distinto al del resto del país, pero también por su propia personalidad.

"Entre que soy canario, que le meto a veces algo de inglés y que digo las cosas sin cortarme... entre todo un poco, eso puede ser lo que haya hecho que me hayan visto distinto", declara Néstor Román.

Preguntado sobre por qué cambió ese nombre por el que ha adoptado en su carrera artística, rememora que este es un alias que le pusieron ya desde niño, entre bromas y juegos de palabras alusivos a la combinación de Néstor con el vocablo inglés "killer" (asesino), sus amigos del barrio de Las Rehoyas de Las Palmas de Gran Canaria.

A él le debe otras peculiaridades suyas, empezando por el estilo que ha elegido, "porque -argumenta-, aunque suene típico, si el rap es la música de los barrios es porque no es lo mismo ser el típico grupo de rock de primer año de carrera, de mamá y papá, que ser un poquito del barrio y expresar las cosas como te salen".

Ese origen suyo -añade- también ha contribuido a determinar la diferencia entre su forma de cantar y la de otros intérpretes del mismo estilo promocionados antes que él en España y de cuyas maneras insiste en desmarcarse reiterando que él es distinto, si bien matiza que, en el fondo, también comparte con ellos muchas cosas.

"Lo bueno que tiene el panorama del rap es que todos trabajamos, más o menos, en la misma dirección y hacia el mismo punto y la mayoría nos conocemos", lo cual ayuda a que "estén creciendo mucho los grupos y los productores", indica.

No obstante, apostilla que, pese a ello, "siempre habrá un sector del público que no entenderá la historia porque el rap no es la música típica de España ni está ligada a su cultura".