El director de la Real Academia Española (RAE), Darío Villanueva, ha celebrado el descubrimiento de los restos de Miguel de Cervantes en la cripta de la iglesia del convento de las Trinitarias, resaltando que "al fin se ha puesto orden en la casa y ya está reluciente".
"Al fin hemos puesto un poco de orden en la casa, la teníamos desordenada y hoy hemos hecho limpieza general, ya la tenemos reluciente. Hemos encontrado un tesoro que teníamos perdido, que es la ubicación exacta de los restos del escritor más importante de nuestra lengua y uno de los más importantes de lengua universal", ha indicado.
Villanueva ha aseverado en declaraciones a Europa Press que se trata de "un buen día sin duda" y se ha mostrado convencido de que los huesos pertenecen al célebre escritor, a pesar de no contar todavía con la evidencia genética. En este sentido, ha señalado que con esta técnica forense existen ya "tres fundamentos rigurosos", al sumarse al estudio del Marqués de Molins en el siglo XIX y a la localización a través del georradar.
Para el director de la academia resultaba "bastante anormal" que España "tuviera un tesoro como éste aún confundido", adelantando que los restos de Cervantes seguirán "en el mismo sitio pero con referencia muy clara para que todos sepan dónde está exactamente el príncipe de nuestras letras".
Además, ha reiterado la importancia de este hallazgo fuera de España. "Yo estoy en esto desde hace cinco años y desde entonces muchas veces he tenido que salir a la palestra, sobre todo con medios internacionales que tenían enorme interés por el tema. Incluso daba la sensación de que interesaba esto mucho mas fuera que dentro de nuestro país", ha lamentado.
En cualquier caso, ha recordado que "felizmente se ha estado a la altura de las circunstancias" y, con este anuncio, entiende que se ha resuelto "una anomalía histórica que parecía muy poco digna, poco conveniente".
Respecto a las palabras del filólogo y miembro de la Real Academia Española Francisco Rico, quien ha calificado de "tontería" este proceso, Villanueva ha preferido no opinar. "Tengo como norma no comentar las opiniones y declaraciones de compañeros de la Academia, que son todos personas muy distinguidas y destacadas y tienen su derecho como todo ciudadano a expresar sus opiniones. Cada uno las emite con total libertad y es el responsable de ellas", ha concluido.