El músico y cantante madrileño Ras Kuko, uno de los referentes del reggae en España afincado en Tenerife desde hace ya varios años, presentará mañana, viernes, 3 de abril, a las 21:30 horas, el cuarto disco de su nueva etapa profesional, "Bass Kulcha", en el Aguere Espacio Cultural de La Laguna.

Los nuevos sonidos de su trabajo, integrado por una quincena de temas, los interpretará junto a su banda One Xe Band, con la que se ha afianzado en esta nueva andadura en Canarias, además de estar arropado por una amplia representación de la escena reggae y hip hop de las Islas, entre los que se encuentran Guiyo, Abel Cordovez, Don Virgilio, Isaiah, Stereoman, Kellah, Dadda Wanche, Javadub, Fernikhan y Moi.

Este nuevo registro es muy especial para este intérprete, que ha contado con la ayuda del músico, productor y técnico de sonido Yeray A. Herrera. Contiene reggae puro, sincero y con sentidas letras que están englobados en el "reggae revival". "Este disco me ha dado la oportunidad de interiorizar mucho, de encontrarme más. He trabajado codo con codo con Yeray Herrera".

Este músico y compositor se encuentra muy a gusto en Tenerife, donde aseguró haber encontrado la paz interior que buscaba tras su ajetreada vida en Madrid, además de rodearse de gente llena de ilusión, en especial la banda que ha montado con músicos canarios, con la que defenderá su música en directo allí donde le contraten.

"Siempre he sido visceral y muy de corazón, de hacer las cosas porque las siento así y eso lo he recuperado. La música es un pilar de mi vida. He interiorizado mucho y he tenido más tiempo para descubrirme y estar conmigo. Antes, en Madrid, era todo más acelerado".

Kuko tiene muy claro que el reggae, surgido en Jamaica en los años 60, es puro mensaje. Por ese motivo los temas que compone son muy meditados y llenos de sinceridad. "El reggae tiene ese cometido de concienciar. No es canción protesta. Tratamos de concienciar en la medida de lo posible, primero a una búsqueda interior. El disco tiene temas que hablan de los momentos sociales que vivimos a nivel político, económico y anímico. Yo canto lo que vivo y lo que veo a mi alrededor, pero también damos pie a la concienciación, a ser conscientes de las realidades que están ahí, pero no tenemos tan presentes. La humildad, la gratitud, el perdón, determinadas cosas que el ser humano tiene que recuperar y exprimir a tope, y en su defecto quitarnos otras que creo que, como seres humanos, nos están haciendo daño, como la competitividad, los egos mal entendidos, los prejuicios, la envidia, estar siempre insatisfechos y compararnos con los demás".

El reiteró la idea de que el reggae "es más una música de concienciación. En este disco hay un poquito de todo, de crítica social, de sacar determinadas verdades de una forma bonita y melódica. Eso es lo que tiene. El reggae no es agresivo ni violento, sino una forma bonita de decir grandes verdades, de las que cualquiera puede sentirse identificado. Desde una relación de pareja, o algo que te ha pasado con determinado grupo, o cosas que has vivido, y también la otra cara de la moneda, una parte de fiesta, de diversión, que también tiene el disco".

Este descendiente musical del recordado Bob Marley reconoció que cuando se pone a componer lo hace para él mismo. "Primero escribo para mí. Son cosas que necesito sacar, como si estuviera delante de un espejo. Luego lo comparto con la gente. La sinceridad es vital. Ser honesto, humilde y consecuente con tu vida y con lo que haces. No somos el centro del mundo".

También es consciente de la evolución que ha vivido este estilo musical. Él se inscribe, actualmente, en el denominado "reggae revival", tendencia que pretende recuperar la filosofía de este movimiento cultural que surgió en la pequeña isla de Jamaica hace ya más de medio siglo.

"Los que vivimos como yo el reggae, esta música tiene un contenido social. Ha salido de una islita, bueno yo diría de África, y se conoce en todo el mundo, como a Bob Marley. Además de ser una de las músicas negras por excelencia, como el jazz o el blues, que vienen del algodón, de la esclavitud, del sufrimiento, es una música con un contenido social muy fuerte. En algunos sitios, como Jamaica, África o Latinoamérica, donde se mueve mucho el reggae es como el periódico del pueblo. Lo que está pasando, para bien o para mal, aunque sea algo banal, de eso se hacen canciones, o de algo dramático o crítico o muy importante. Es con lo que el pueblo se alimenta".

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Kuko

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