No es la primera vez que trabaja en una producción del Auditorio de Tenerife, pero se estrena como directora de escena titular de un proyecto operístico. La italiana Stefania Panighini es la responsable de la escenografía de "Hansel y Gretel", la ópera que se representará el 10 y 12 de abril en la Sala Sinfónica del Auditorio. Con Rosseta Cucchi ubicó a Don Giovanni y a Leporello en una discoteca neoyorquina de los años ochenta y en esta ocasión localiza el conocido cuento de los hermanos Grimm en una favela donde reina la pobreza. "Esto es una lección de vida; un toque de atención para que los más pequeños entiendan que no todo se soluciona con la Play Station, sino que hay niños en el mundo que no tienen nada que comer y desconocen el concepto de jugar porque los ponen a trabajar en lugares horribles", avanza.

Rosseta Cucchi, Silvia Paoli, Stefania Panighini... ¿La conexión italiana con el Auditorio de Tenerife continúa activa?

Sí, parece que por aquí nos tratan bien (ríe). Es un placer trabajar en un lugar donde existe una apuesta permanente por una cultura de calidad.

¿Es muy distinto diseñar una ópera para un público infantil que proyectar un título más convencional?

La creatividad, las ganas y la ilusión no cambian, pero lógicamente hay que darle unas connotaciones diferentes, aunque en el caso de "Hansel y Gretel" yo no hablaría de una ópera de perfil infantil sino de una versión pensada para una audiencia familiar.

¿Qué destacaría de esta adaptación operística del cuento de los hermanos Grimm?

La idea es dotar al espectáculo de una teatralidad sin que se pierda el concepto de ópera, es decir, que pueda ser una experiencia aprovechable para los que se acercan por primera vez a este género musical. Todo gira en torno a los conceptos de realidad y fantasía.

¿Cuál es la marca personal que le ha añadido a este encargo?

La historia está protagonizada por una familia muy pobre que vive en una zona humilde; en una especie de favela. Desde ahí construimos una escenografía urbana en la que hay un enorme grafitiy bandas callejeras...

¿Ha dolido tener que "amputar" partes con respecto al título original?

Digamos que hemos completado un gran trabajo de dramaturgia y reducción del apartado musical. Queremos captar los instantes principales del cuento en una hora para crear una versión en la que hay teatro y ópera.

¿Y encima se "enfrenta" a una audiencia extremadamente exigente?

Un niño con una pregunta sin aclarar es un peligro y, por lo tanto, no puedes dejar nada al azar... Él o ella no se va a volver tranquilo a casa con una duda. Quizás por eso es más complicado crear distintos planos y lo recomendable es ser directo, claro y preciso. Además, en esta ópera los protagonistas interactúan con el público...

¿No le preocupa la agitación que se pueda crear en el patio de butacas?

Eso puede llegar a ser peligroso, pero me gusta que los espectáculos estén vivos y cómo perciban lo que está ocurriendo en el escenario los niños es algo muy didáctico.

¿Hasta qué punto estas actividades contribuyen a regenerar la audiencia?

El reto es crear una situación de normalidad cultural a través de la ópera; no que esto se convierta en una actividad aislada que se hace una vez al año. Aunque suene algo utópico, igual empezamos a construir una sociedad mejor en la que los valores culturales puedan ser decisivos para encontrar nuevos caminos... La cultura no se puede entender como algo ocasional.

Volvería satisfecha a casa si al final de este proyecto...

...me daría por satisfecha si conseguimos crear una atmósfera para soñar; ese mundo de colores y dulces que tan bien está reflejado en el cuento. La ópera está diseñada para ser entendida por niños de a partir de siete años... Auditorio de Tenerife lleva tiempo trabajando la base para ir incorporando nuevos espectadores a sus propuestas escénicas. Esta versión de "Hansel y Gretel" es el mejor ejemplo de una labor que está planificada a largo plazo. Aquí no se persiguen resultados inmediatos, sino crear un tejido cultural que proporcione estabilidad a una agenda dinámica. Alemania invierte dinero en cultura, pero la mayoría de sus proyectos no tienen corazón... El arte es soñar y necesita alma para crecer.

¿De sus palabras se desprende que habrá una próxima vez?

Yo estoy encantada, pero eso es algo que no depende solo de mí. ¿En qué otro sitio voy a disfrutar de esta vista al mar cuando necesito parar un ensayo?