Como si de un derbi de máxima rivalidad se tratara, por proximidad geográfica se me viene a la cabeza un CD Tenerife-UD Las Palmas o un pulso entre Messi y CR7, Santa Cruz de Tenerife y La Laguna decidieron ayer cruzar sus ofertas de ocio, concretamente, enfrentaron casi con el mismo horario las agendas de Actúa 2015 y de la Fiesta de la Música.

El área metropolitana disfrutó de una jornada soleada, con unos repuntes de calor que "castigaron" algunas calvas de los músicos que se echaron a la calle en busca de un puñado de aplausos. En un primer análisis hay que decir que las "vacas sagradas" se inclinaron por Aguere. En la capital se quedaron los artistas que aspiran a ocupar el espacio de los creadores que decidieron desempolvar sus temas en la Ciudad de los Adelantados. Y es que la fiesta de la música, la cultura y el ocio (Actúa) tiene claro que es un vivero de almas emergentes que se divierten no solo a través de la música sino del baile.

Si de lo que se trataba era de dinamizar de la mejor manera un sábado, está claro que tanto la Fiesta de la Música como Actúa, proyecto que abandera Radio Club Tenerife (Cadena Ser), cumplieron de largo con sus objetivos. Al comenzar esta crónica, las coreografías estaban en pleno auge en la plaza del Príncipe y las actuaciones más relevantes aún no habían empezado en San Cristóbal de La Laguna, especialmente, en el escenario de la Plaza del Adelantado. Allí quedaba música para rato.

Tanto en Santa Cruz de Tenerife como en La Laguna se repitieron las escenas protagonizadas por músicos que aguardaban sus minutos de gloria. Bajo un calor de justicia, que los transeúntes trataron de combatir con cervezas, helados y algo de sombra, arrancaron las actividades de Aguere: setenta propuestas culturales se desgranaron en un programa que "cultivó" todos los géneros musicales.

Casi al mismo tiempo las calles que confluían con la plaza del Príncipe y la plaza del Chicharro eran un lugar de paso para jóvenes que decidieron celebrar el Día Mundial de la Música en compañía de un instrumento. A esa hora, las propuestas que más resonaban en las arterias de la calle Valentín Sanz eran de pop; sonidos frescos que se reflejaban en los rostros de los protagonistas de las veintitrés actuaciones que se encadenaron en seis horas de conciertos. Para por la tarde se reservó la parte asociada con las distintas disciplinas de baile. Eso sí, por la noche, en La Noria, aguardaba el gran Billy Branch, estrella de la undécima edición del Festival Santa Blues junto con las bandas tinerfeñas Aguere Raw Project y The Clovers, que hizo doblete al participar en la Fiesta de la Música lagunera.

Blues del bueno, entre otros géneros, se escuchó en alguno de los diecisiete puntos de exposición que se crearon en La Laguna: folías, rock de notas gruesas, jazz, folk y otras texturas tan universales como el tango sonaron con fuerza a medida que el sol se fue apagando.

Y es que mientras La Laguna cantaba, Santa Cruz bailaba. La plaza del Príncipe fue el escenario de una explosión de coreografías interpretadas por legiones de artistas procedentes de distintas academias de baile: con esas coreografías se fue apagando Actúa 2015.

Exhibiciones de sonidos electrónicos -en la imagen superior de la derecha se puede ver la sesión protagonizada por el joven Dj Eliezer (15 años)-, varios desfiles de moda protagonizados por la firma Marco & María y exposiciones de artesanía, escultura, pintura completaron las etapas de Actúa 2015: el público también pudo disfrutar de una oferta gastronómica y la presentación de algún que otro producto. Ese, el carácter dinamizador de ambos festivales, se convirtió durante toda la jornada de ayer en el mejor aliado de los establecimientos que vivieron en primera línea estas actuaciones. Como si de una señal se tratara, y dejando de lado una "competencia" sana, lo que se percibió ayer en La Laguna y en Santa Cruz de Tenerife es que a la primavera le queda un telediario.