El músico Miguel Ríos, que fue miembro de la Plataforma de Apoyo a Zapatero, cree que debería de ser "fundamental" que la gente pueda decidir en Cataluña, para lo que ha defendido que habría que reformar la Constitución.

Miguel Ríos (Granada, 1944) ha culpado a la "actitud política" de que mucha gente probablemente quiera "romper la baraja" en Cataluña, donde todos los puentes que se habían tendido se han ido rompiendo por intereses "absolutamente oscuros".

Ha defendido en declaraciones a los periodistas en Tenerife la importancia de que el pueblo sea soberano, aunque nunca lo haya sido, ha dicho, pues ya está bien de que haya políticos que cobran de los impuestos de los ciudadanos y hacen lo contrario de lo que la sociedad reclama.

El cantante de rock & roll granadino ha criticado que no se le preste atención a problemas de alcance planetario, como el calentamiento global, porque "hay un tío en Cataluña que dice esto o lo otro".

Por ello, ha pedido que se arregle ya la convivencia con unas reformas en la Constitución que permita un referéndum en Cataluña, donde la mala gestión política ha ido creando desafectos.

"El pueblo está por encima de los que lo mandan porque es el pueblo el que tiene que decidir", ha asegurado Ríos, para quien los ciudadanos críticos harán posible la convivencia.

Ríos, que participó en la Plataforma de Apoyo a Zapatero creada durante las elecciones generales de 2008 como un instrumento para apoyar la reelección del candidato socialista José Luis Rodríguez Zapatero, ha lamentado que en dos años el expresidente cambió totalmente su discurso por el que le votó y dio la cara por él.

El autor de "Vivo en la carretera" ha reconocido que sueña con una sociedad "más crítica" que castigue a los políticos que no cumplen con su palabra.

Miguel Ríos participa hoy en Santa Cruz de Tenerife en la jornada de clausura ciclo Otoño Cultural de la Fundación CajaCanarias "El mundo que queremos" donde debatirá con el escritor Luis García Montero acerca de la "Cultura y dignidad democrática".

Posteriormente, el cantante, responsable de ponerle letra en 1968 a la novena sinfonía de Beethoven, con su "Himno a la alegría", ofrecerá un breve recital.