La semana pasada intentábamos dar un repaso a discos que no pudimos cubrir en nuestra reseña semanal al mundo del disco canario. Hemos intentado abordar distintos sellos discográficos para así rendir cuentas con algunos importantes discos que se fueron editando durante el 2015, pero nos sentimos gratamente desbordados ante tanta novedad discográfica.

La semana pasada, en cierto modo, hablamos de sellos consagrados, y de discos de artistas canarios que están editando en la península en sellos de prestigio dentro del indie español. Nos centraremos hoy en sellos minoritarios y bandas que desde el underground están haciendo historia.

Dentro de las producciones más curiosas destacamos en Tenerife la de Keta, que bajo el título "Yo mismo soy libre" editó para Ocho Producciones de La Laguna un disco de rap de los que no se olvidan. El artista de Santa María tampoco olvida su pasado en anteriores proyectos siempre vinculados al rap, ni perdona la realidad que envuelve a su barrio y a la isla en general. Pura poesía y crítica social, con grandes dosis de humildad cuando realiza introspectivos ejercicios de reflexión. Lamentamos no haber podido dar mayor cobertura a un disco de 14 canciones bien producidas, que igual las defiende rodeado de guitarras eléctricas un domingo en el rastro santacrucero o a micro abierto en la soledad de improvisados estudios que se distribuyen por nuestra geografía.

Nanosonora editó un EP de 3 canciones bajo el nombre de "Intrepid". Grabado entre Arena Digital y los nuevos estudios Superstereo de Jonás en La Laguna, ha sido un soplo de aire fresco ante la creada necesidad de acompañar de textos toda composición sonora. Auténtico malabarismo instrumental del guitarrista Fernando Díaz "Nano", acompañado de una segunda guitarra y bajo, y el siempre preciso Fede Beuster a la batería.

No tuvimos oportunidad durante este año de reseñar el disco "Solo los muertos estarán a salvo" de The Amaroses, el grupo grancanario liderado por la vocalista Demelza Cruz. Anunciamos su inminente edición cuando comentábamos las novedades del recién creado sello Soy Fans Disquera, y esta cuarta referencia traía unos extras en la edición al ser una caja de lujo con un libreto con las letras y un bonito detalle en su interior. Aún disponible en el sello, catorce canciones para escuchar en cualquier plataforma digital ahora que sabemos que nos acompañarán igualmente este nuevo año.

Y si hubo un género musical al que no dedicamos ni una sola palabra fue al black metal. Plagado de textos paganos, una obsesión por la muerte y la mórbida atracción por lo profano es el proyecto Cryfemal, que aunque establecido en Madrid actualmente, comenzó su adoctrinamiento en los sonidos oscuros del valle de Güímar a finales del milenio pasado.

Resulta casi imposible conseguir todos los trabajos editados de este proyecto, por tratarse de ediciones americanas, mexicanas y de países más gélidos como Austria. Sus discos han sido editados en CD que siempre incluyen las letras, pero su discografía se encuentra repartida entre cintas de cassette y discos de vinilo que se venden bien en el mercado de segunda mano. Sellos específicos de black metal que valoran un proyecto donde un individuo clama a Lucifer, tocando todos los instrumentos y cargando la atmósfera al máximo.

En los directos que realiza en Europa y América se acompaña de una banda quedándose solo ante el micrófono, frente al público. Firma con el nombre de Ébola y junto a otro elemento llamado Guayota han dado vida a Muert. Un potente dúo de black metal que volvieron a tocar en Estados Unidos a finales de año. Su disco "Ahul xaxo" ha sido publicado en México por el distinguido sello Self Mutilation, y es un decálogo de maldiciones a los conquistadores de las Islas Canarias.

El black metal de cada país reafirma sus señas de identidad, recuperando lenguas desaparecidas, mitologías paganas, con total desprecio a la moral religiosa. Con Muert están descubriendo en el mundo nuestro pasado como pueblo aborigen, la sangrienta conquista a golpe de la espada y la cruz, pero también el misterio de las pirámides, la fuerza de los volcanes, y la eterna maldad de Guayota que cuentan que nos condenó a la oscuridad al sepultar a Magec en el Teide. Música, mitología y, una vez más, discos que hacen historia.