El dramaturgo y académico español José Ricardo Morales falleció el miércoles pasado a los cien años de edad en Chile, país al que llegó en 1939 a bordo del Winnipeg, un barco que fletó el poeta Pablo Neruda con refugiados españoles que huían de la Guerra Civil, informó hoy la familia.
Nacido en Málaga en noviembre de 1915, Morales publicó durante su larga trayectoria más de cuarenta obras de teatro y numerosos ensayos, y fue galardonado con diversos premios.
El funeral del dramaturgo se celebró este viernes en el cementerio Parque del Recuerdo, en Santiago de Chile, donde sus restos fueron incinerados tras una ceremonia litúrgica.
La ministra de Cultura en funciones, Claudia Pascual dijo hoy que la historia del teatro en Chile siempre llevará la huella de José Ricardo Morales.
Pascual destacó que Morales fue uno de los precursores del teatro del absurdo, abrió camino al desarrollo de las letras, la docencia, y por supuesto al arte escénico, desde donde contribuyó incluso a la fundación del Teatro Experimental de la Universidad de Chile.
"Hoy lo despedimos a nombre del Gobierno de Chile y el Consejo de la Cultura con infinita gratitud por su imborrable aporte a la profesionalización del teatro chileno, y enviamos nuestro cariño a toda su familia y seres queridos", subrayó la ministra.
En su juventud, Morales estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Valencia, luchó en la Guerra Civil española (1936-1939) con el bando republicano y fue retenido en un campo de concentración en Francia antes de exiliarse a bordo del Winnipeg junto a otros intelectuales españoles.
En la nación austral continuó sus estudios en la Universidad de Chile, donde en 1941 fundó junto al dramaturgo Pedro de la Barra el Teatro Experimental, que marcó el inicio de una nueva etapa para las artes escénicas del país y se comenzaron a montar obras de vanguardia europeas.
Como académico contribuyó a la formación de la Escuela de Arte de la Pontificia Universidad Católica, fue profesor de Historia del Arte en la Universidad de Chile y formó parte del Departamento de Estudios Humanísticos.
En 1974 fue nombrado miembro de la Academia Chilena de la Lengua, además recibió varios galardones, como el Premio Federico García Lorca (1990) y la Condecoración de la Orden Isabel la Católica (1995).
También fue nombrado socio de honor de la Asociación de Autores de Teatro española (2003).