Captar la atención de los escolares y despertar su imaginación a través de los cuentos y la literatura en general es la loable causa que mueve al equipo de narradores orales, escritores y artistas que han hecho realidad una nueva edición de la Muestra del Libro Infantil y Juvenil, que organizada por Ángeles Alonso se desarrolla en el centro de arte La Recova de Santa Cruz, hasta el próximo 3 de abril.
Este encuentro con la magia de los libros y su lectura, por la que desfilarán más de medio millar de alumnos de colegios del área metropolitana, sin contar los que la visiten con sus padres el fin de semana, se celebra en un espacio en el que se han recreado diversos lugares del mundo y en el que se cuentan historias relacionadas con las culturas de dichos enclaves, además de ofrecer talleres.
Las escultoras Carmen Gloria Martín y Esther Rodríguez han sido las encargadas de elaborar con diferentes materiales reciclados un bosque, un iglú, un jardín japonés, un tagoror y una jaima, esta última montada con la ayuda de la Asociación de Amigos del Sáhara. Estos decorados ambientarán los diferentes cuentos del mundo, lema de la Muestra, que serán narrados por Anna Griott, Inma Luna, Isabel Bolívar, Laura Escuela y Nareme Melián.
Esta iniciativa, que cuenta con la colaboración del blog Cuentos del Mundo, de Gema Luengo, promueve una serie de encuentros con los escolares en los que estarán muy presentes dos libros: "El dragón que se comió al sol", en el que Anna Griott ha reunido cuentos de Senegal, y "Cómo nacieron las estrellas", donde la escritora Clarice Lispector describe leyendas de la selva brasileña. También se han habilitado varios espacios para consultar y leer una amplia selección de libros y otro para que los escolares puedan contar sus cuentos.
La escritora, periodista y antropóloga madrileña Inma Luna fue la encargada de recibir ayer a los alumnos de 6 y 7 años de edad del colegio Adonai, con los que mantuvo un encuentro, contó unos cuentos de la brasileña Clarice Lispector y realizó un taller de haiku en el jardín japonés, así como otro de manualidades sobre un abanico japonés.
"El haiku lo entendieron con mucha naturalidad. Les comenté en qué consistía la composición y cómo los japoneses intentaban captar con ello un momento de conexión con la naturaleza. Les pregunté dónde les gustaría estar a ellos, y eligieron la playa. Les dije que se tumbaran en la alfombra y dijeran qué sensaciones tenían. Lo primero que dijeron fue: siento la brisa, luego, escuchamos las olas; y otro dijo en broma, me quemo el culo. Contamos las sílabas y encajaba, perfecto, y lo dejamos".
Esta escritora, que en los próximos días continuará con el taller de haiku, además de narrar un cuento persa, otro senegalés, otro sobre el Universo y dos de Cecilia Domínguez, considera que "la clave para captar su atención es que ellos puedan estar sumergidos en la historia que les estás contando. Hacerles un poco partícipes, por eso es bonito dialogar con ellos, hacerles algunas preguntas y que se sientan parte del relato".
La cuentacuentos y docente Laura Escuela será la encargada de recibir hoy a los escolares que asistirán, desde las 10 de la mañana, a la Muestra, donde les contará historias y les dará un taller en el iglú sobre "Los mil blancos de los esquimales", pueblo muy capacitado para percibir los diferentes tonos del blanco.
"Me gusta contar cuentos con libros-álbum que tienen muchas ilustraciones, porque cuentan parte de la historia. El cuento no lo leo, sino que lo cuento de memoria y me apoyo en la imagen para que ellos vayan haciendo su aportación de lo que ven en la ilustración. Si son muy pequeños me gusta apoyarme en el libro-álbum y en la música, porque suele ser muy efectivo", matizó.
Inma
Luna
poeta, periodista y antropóloga
Laura
Escuela
narradora oral, maestra y psicopedagoga