Desde el concepto de la danza como elemento formador y lúdico, los hermanos Sergio y Octavio Hernández llevan 26 años impartiendo clases en La Victoria con este género como instrumento vertebrador. "No se trata del acto exclusivo de bailar, también supone potenciar valores como la convivencia, la integración y el contacto personal".

A día de hoy cuentan con 120 matriculados, muchos de ellos hijos de antiguos alumnos, un conjunto multiforme "porque no somos excluyentes; aquí valen todos: gordos o flacos; altos o bajos; elásticos o rígidos", explica Octavio, quien destaca la presencia de pequeños con síndrome de Down, celiacos o diabéticos que, sin embargo, se desenvuelven "dentro del grupo como cualquiera".

En las clases participa desde una niña con año y medio, "a la que su madre manda con su orinal", hasta jóvenes en etapa preadolescente que manifiestan unas inquietudes propias de su edad, asumiendo "pautas de responsabilidad" y comportamientos como "el respeto y la solidaridad hacia lo diferente", señala Octavio.

"El cuerpo hay que tratarlo bien, pero la mente aún más", comenta este bailarín, mientras marca en el local que ocupan en la Casa de la Juventud los pasos coreográficos de un nuevo montaje que, según asegura, va a sorprender a los padres, participantes en los espectáculos y actores de un lenguaje comunicativo con sus hijos, pero que tienen prohibida la entrada en el aula.

En el ideario de estos hermanos figura con trazo grueso un principio irrenunciable: "Los niños tienen que ser eso, niños, y disfrutar con lo que hacen, sin ningún espíritu competitivo y con el objetivo de jugar y divertirse", más allá de sus aptitudes.

Unas recientes investigaciones, apoyadas en métodos de neuroimagen, concluyen que la danza activa los circuitos neuronales motores y sensoriales, a la vez que la música estimula los centros de recompensa del cerebro, que actúa como estimulante de la atención, la memoria, la coordinación y la conciencia espacio-temporal, resulta beneficiosa para la salud y para quienes padecen una patología neurológica.

Estos pequeños adelantan a hoy la celebración del Día Internacional de la Danza y lo hacen con la máxima ilusión, como si se tratara de auténticos profesionales, ofreciendo una actuación en la que intervienen la Escuela de Danza y la Escuela de Gimnasia Rítmica del municipio de La Victoria, junto al grupo de baile moderno L-KOut.

Espectáculo: 29 de abril.

Lugar: Centro Cultural La Vera.

Hora: 17:00.