La aventura es la clave del nuevo trabajo del escritor tinerfeño Pablo Martín Carbajal, quien aprovecha también las más de cuatrocientas páginas de "Tal vez Dakar" para contar la historia del África Occidental desde 1907 hasta la actualidad, basándose en parte en su experiencia profesional.
La cuarta novela de este economista apasionado por la literatura, cuya obra anterior es más de corte intimista, será presentada hoy, a partir de las 20.30 horas, en el Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife, en un acto en el que la compañía Delirium Teatro escenificará algunos fragmentos del texto con un formato que emulará una sesión dadaísta.
"Esta novela trata sobre un empresario canario, Álvaro Camilo, que va a Senegal en una misión de la Cámara de Comercio de Tenerife para ampliar el negocio familiar y se encuentra en el hotel con una chica muy llamativa que vende arte africano y le quiere vender una máscara, pero él quiere otra que no está en venta. Hay todo un secreto para descubrir, porque esa máscara se enlaza con la historia de África, con las vanguardias, con todo lo que supuso el arte africano para Picasso".
De esta forma, Carbajal recorre de la mano de su personaje protagonista la historia del siglo XX de África y penetra en la sociedad senegalesa y en su cultura con el objetivo de ayudar al lector a comprender cómo es África, sus retos, sus fracasos, sus cosas buenas y malas, pero con cierto toque pedagógico narrado en tono de novela.
"Serían dos historias paralelas, la del empresario que averigua el secreto de la máscara y en la otra encontramos a personajes como Picasso, Bretón o el poeta y líder de movimiento de la negritud Sedar Senghor, que fue el primer presidente de Senegal".
"Tal vez Dakar", una novela de aventuras con sexo, muerte e intriga, entre otros recursos, es la primera de las cuatro escritas por el autor en las que indaga en África. "Esta es la que más vínculo tiene con África en sí. Las tres anteriores son más intimistas, más relacionadas con la superación personal, la búsqueda de la felicidad. Es una novela más en clave de aventuras y es la primera de una serie. Los protagonistas están trabajando en otra novela, pero irá sobre el mundo árabe, luego habrá continuidad sobre África".
Pablo Martín Carbajal reconoce que siente cierta familiaridad con las aventuras que vive Álvaro Camilo, porque su profesión, actualmente director general de Asuntos Económicos con África, le ha llevado a organizar varias misiones al cercano continente.
Con respecto a las referencias a Picasso y los movimientos artísticos en la novela, abundó en la idea de que "alguien dice que lo primero que se admiró de los negros fue el arte africano, en 1907, en la época colonialista. Hay mucha admiración por la cultura africana en la novela. Me voy a los orígenes de esa admiración e indago en lo que supuso el arte africano en el cubismo, dadaísmo y surrealismo; y también cómo los creadores del movimiento de la negritud sabían qué era el arte africano y cuando llegan a Francia recogen su herencia y la adoptan para su discurso".
La aventura y la identidad de la raza negra son dos de los principales ingredientes que se mezclan en este nuevo paso literario de Carbajal, narración ambientada en Dakar y parte en París, "cuando estaban los senegaleses, los antillanos, los americanos negros, los negros anglófonos, los malgaches... Estaban todos estos negros distintos unos de otros. Lo único que les unía era el color de la piel y la lucha por la independencia. Todo esto también se refleja en la novela, la identidad de la raza negra".