La estética devenida del error, el fallo o el error de lo perfecto, es la protagonista de la instalación colectiva "What''s Up Glitches", en la que intervienen los artistas Alby Álamo (Las Palmas, 1977), Javier Corzo (Santa Cruz, 1986) y Ricardo Trigo (Gerona, 1980). Esta iniciativa se desarrolla en la sala de Área 60 del Tenerife Espacio de las Artes TEA de Santa Cruz, hasta el próximo 4 de septiembre.

Este proyecto, promovido por el comisario de la muestra, Néstor Delgado, e incluido en el ciclo "Una antropología de la emergencia", "deja ver las partes y las estructuras que normalmente no se ven en una exposición y que a veces son casi tan interesantes como lo expuesto", aclaró Álamo en la presentación de la instalación.

La idea del "glitch", término del argot digital que se utiliza para nombrar un error de software que no afecta al funcionamiento, es la columna vertebral de esta peculiar propuesta en la que se embarcó este trío de artistas, quienes se han comunicado para intercambiar información a través de Skype. Álamo desde Alemania, Corzo desde Inglaterra y Trigo desde Barcelona.

Cada uno de los participantes desarrolla su propia línea creativa y diferentes disciplinas. Álamo y Corzo están más relacionados con el mundo de la instalación, mientras que Trigo lo está con el 3D y los videojuegos.

"Lo que sí hay como hilo conductor entre ellos es que desarrollan un interés por la estética del error, del fallo. El glitch, que viene del arte digital, es cuando hay un fallo, como cuando ves una película y de repente se pixela y se ve mal. Eso te hace ver la estructura misma del programa, pero al mismo tiempo no rompe su funcionamiento. No se apaga la película, simplemente deja ver ese error, pasa igual en los videojuegos", puntualizó Delgado.

La sala de Área 60, cuyo objetivo es promover el arte emergente y las nuevas formas artísticas, se ha transformado en un laboratorio en el que los artistas experimentan con el error, elemento que destaca el espacio. "Es llevar la idea del error a las formas que estamos acostumbrados a ver normalmente como espectadores en las exposiciones. En este sentido, dentro de la exposición hay elementos que normalmente quedan fuera o se consideraban como residuales, como por ejemplo los clavos de la exposición anterior, elementos que ellos aprovechan en esta instalación".

"What''s Up Glitches", nombre con cierto humor rapero, reúne en su seno elementos como tornillos repartidos por diversos puntos de la sala, imágenes en modelaje en 3 D que podrían ser una escultura, la proyección de un vídeo con "glitch", una tela de croma, obras que juegan con el formato del plexiglás, entre otras piezas que invitan a explorar con la naturaleza de los materiales.

"Hay mucha obra diferente, pero se podría decir que se mueve entre lo escultórico y lo digital (...). Plantear un error dentro de la sala de arte deja ver ese espacio que es el cubo blanco. Hace evidente lo que normalmente se toma por descontado. Se sabe que la sala blanca está ahí y lo que generalmente importa es la obra. Lo que ellos hacen es resaltar el espacio en el que están las piezas. La exposición se convierte en una instalación en la que toda la sala es considerada una pieza".