Mientras aguarda el inicio del rodaje del largometraje "Haunted", una revisión a través del lenguaje cinematográfico de la novela "Otra vuelta de tuerca" (Henry James), Juan Carlos Fresnadillo (1967) rescata vivencias que lo acompañan desde que hace 19 años se dio a conocer con "Esposados", un título que cambió su vida. "Ese corto me dio el pasaporte para poder viajar por todo el mundo a través del cine", asegura un director que sigue "Intacto" quince años después de estrenar su primera gran película. "Algo sí que queda de aquel chico curioso al que le gustaba innovar y explorar nuevos territorios. De hecho en mi último proyecto -una serie que en breve se va a estrenar en la televisión estadounidense- me atreví a introducir un elemento tecnológico novedoso", desvela un profesional del séptimo arte que "vigila" desde su residencia de Los Ángeles (EEUU) el desarrollo de la muestra fotográfica que lleva su firma y que se puede visitar en el TEA Tenerife Espacio de las Artes ("Limbo") hasta el ecuador del próximo mes de septiembre.

Casi veinte años después de recibir una nominación al Oscar por "Esposados" (1997), el tinerfeño se siente seguro de las decisiones que tomó. "¿Veinte, ya?", replica sin poder reprimir unas señales de asombro que iluminan su rostro. "Esposado fue una oportunidad irrechazable para indagar y conocer un cine que hasta ese momento veía de lejos", puntualizando que su primera experiencia cerca de la industria estadounidense fue una especie de reacctivo. "¡Atrévete y busca algo mayor", explica sobre los preparativos de "Intacto".

Como si estuviera viajando en una montaña rusa. Así es como se siente Fresnadillo cuando vuelve la mirada atrás. "No sé si Intacto hubiera existido de haberme quedado en Tenerife. Probablemente, no... Hacer películas en Estados Unidos te pone al límite; allí las exigencias son más salvajes y los tiempos en los que debe madurar un proyecto son mucho más cortos que los que se dan en Europa", añadiendo que en el viejo continente "existe un mayor respeto a la figura del director. No hay nada de lo que hice que me pueda conducir a tener una sensación de arrepentimiento porque en esa etapa de mi vida estaba rodeado de personas que creían en mí y me daban buenos consejos. La pasión que siento hoy cuando estudio una posibilidad de trabajo es la misma que tenía entonces porque, entre otras cosas, tengo claro que he crecido como director sin perder de vista dónde estaban mis raíces", afirma justo antes de revelar que "Intacto" tenía un punto de partida bien definido. "Llevaba unos cuantos años en Estados Unidos y, por lo tanto, las posibilidades de estrenarme como director de un largometraje allí eran reales, pero hubo un ataque de sensatez que me hizo volver... La verdad es que no me costó mucho tiempo autoconvencerme de que un proyecto tan importante debía cocinarse en España, cerca de algunas de las personas que estuvieron a mi lado con Esposados", rescata de una aventura que continúa ocupando un lugar de privilegio en su corazón. "Durante el rodaje y posterior promoción se dieron algunas diferencias en el grupo, pero esa tensión era lo mínimo que podía pasar cuando se juntan tantos egos creativos alrededor de un trabajo al que muchas personas dedicaron un montón de cariño".

Juan Carlos Fresnadillo reivindica que "Intacto" fue una prueba definitiva para mostrar "un lenguaje cinematográfico en el que convivían los conocimientos que acumulé antes del estreno de Esposados (1997) y mi aprendizaje en América. Estados Unidos sacó lo mejor de mí. Nada de lo que soy se hubiera dado de esta manera sin haber cubierto esa etapa. Mi obra tiene un sentido fotográfico muy marcado porque el fotógrafo apareció antes que el director, pero hoy entiendo estas dos facetas artísticas como la suma de unos valores que son vitales para admitir que estoy pasando por uno de los periodos más creativos de mi vida".

La interminable lista de premios que acumuló "Intacto" no pasó de puntillas por delante del productor Danny Boyle, quien encargó al santacrucero "28 semanas después" (2007). "Ese Fresnadillo era más americano que el que se mostró en su primer largometraje... Ahí sí aplique al cien por cien todos los conocimientos que aprendí en Estados Unidos", recalca en unafranja de la entrevista -realizada durante su ultima estancia en la Isla para dar a conocer el contenido de "Limbo"- en la que revela que "inicialmente pensé que ese era un proyecto demasiado agresivo para mí porque, aunque a lo mejor puede sonar algo raro, yo tengo un fondo romántico que no se apreciaba en una experiencia en la que me sentí libre para hacer lo que más me apetecía. Eso es algo que siempre tiene que estar en los proyectos que acabo dirigiendo", aclara un creador que nunca ha renunciado a unos principios casi quijotescos.

El director de "Intruders" (2011) observa con optimismo como las Islas se han convertido en un punto estratégico para las grandes producciones internacionales. "Hay una rentabilidad económica claramente asociada a las ganancias que generan esos rodajes en las Islas y otra que tiene un perfil mucho más cultural", avanza respecto a la posibilidad que "están teniendo los jóvenes canarios que quieren dedicarse a esto de estar en contacto directo con el gran cine... La posibilidad de aprender observando cómo trabajan los grandes directores es una oportunidad única que no se da en otras zonas del mundo. Yo, por ejemplo, tuve que irme a Madrid porque la realidad hace 20 años era distinta", recupera un profesional que no duda de que "existen muchas posibilidades de que Canarias sea el Hollywood de Europa", vaticina de un negocio que hay que cuidar.

Potenciar las infraestructuras de las Islas para evitar que se produzca una situación de "colapso" en el caso de que existan varios proyectos en marcha al mismo tiempo es, a juicio de Fresnadillo, uno de los puntos que deben fortalecer las administraciones públicas y las empresas que prestan su apoyo a los grandes rodajes para continuar estirando el buen momento que se percibe en la actualidad. "El cine que se hace en Canarias también debe beneficiarse de esas estructuras", alerta sin perder de vista que le gustaría volver a trabajar pronto en casa. "Yo podría sacar más partido que casi nadie si me plantearan rodar en el Archipiélago. Conocer el terreno siempre es una ventaja (sonríe)", defiende un autor que posiciona el producto por delante de los premios: "Me obsesiona hacer buenas películas, si después cae un Oscar, bienvenido sea", concluye.

Vea aquí el tráiler oficial en inglés del largometraje "Intacto" (2001) dirigido por Juan Carlos Fresnadillo.

Un exitoso "robasuerte"

Andrés Koppel y Juan Carlos Fresnadillo son los autores de un guion que entrega a Federico el don de arrebatarle la suerte a las personas que lo rodean. Su trabajo consiste en gafar las rachas victoriosas de los clientes de un casino que está ubicado en una zona desértica que es propiedad de Sam, un superviviente del holocausto judío. Federico pierde sus poderes en un pulso con Sam, pero al cabo de los años encuentra a Tomás, superviviente de un accidente aéreo que este utiliza para retar a Sam con un chico tan poderoso como él. Alrededor de esta intrigante trama crece "Intacto" (2001 - Sogecine), un largometraje que acumuló más de cuarenta premios nacionales e internacionales. Fresnadillo, que cuatro años antes había sido nominado a los Oscar por el corto "Esposados", se puso al frente de la dirección de un proyecto cinematográfico que contó con un reparto formado por Leonardo Sbaraglia, Eusebio Poncela, Mónica López, Antonio Dechent, Max Von Sydow, Guillermo Toledo, Luis Mesonero, Paz Gómez, Marisa Lull, Andrea San Vicente y Jesús Noguero. Este thriller, además, contó con la fotografía de Xavier Giménez y la música de Lucio Godoy. El duelo entre Tomás (Sbaraglia) y Federico (Poncela) se refuerza con un segundo foco de atención propiciado por una policía (Mónica López) comienza a investigar la muerte de un familiar en extrañas circunstancias.

Juan Carlos Fresnadillo

Director de Cine