Como si de un espectáculo se tratara, cada mujer hará de su secreto lencero su propio regalo. Buscaremos sorprender, sobre todo a nosotras mismas. Si queremos hacernos con la prenda correcta, nuestro objetivo será llegar hasta las maestras corseteras. Si pretendemos conocer lo que las tendencias nos proponen, en Noviembre la cita es con Victoria Secret''s. Este año los ángeles se trasladan a la ciudad de las luces y el amor, este año brillará París.

Cuando vemos este tipo de puesta en escena, con gran derroche de tejidos, cortes y piezas, todo el mundo piensa que para poder lucir estas prendas es necesario tener esos cuerpos perfectos. Sin embargo la lencería se estudia para que las mujeres puedan lucir sensuales, bellas y femeninas. El despliegue de posibilidades se hace infinito, cada prenda tiene sus características, funciones y momentos.

Si clasificamos la ropa interior por la importancia que juega a la hora de vestirnos sin duda el primero es el sujetador, aunque los datos indican que el 80% de las mujeres desconoce la talla que usan. Los profesionales reconocen que el impulso por comprar hará que, si la prenda es bonita y barata, nos hagamos con ella, quede bien o no, sin prestar más interés ni tan si quiera a los aros, que son la parte principal y no son universales. En Tenerife no quedan demasiadas corseterías, pero alguna aún sobrevive. Suelen ser establecimientos con mucho encanto, donde las dependientas y corseteras conocen mucho más allá de lo que se recoge en los catálogos de las grandes cadenas. Las profesionales que encontraremos en los comercios especializados podrán indicar el tipo de forma que favorece: "balconette", palabra de honor, "halter", clásico o "bralette", incluso orientarnos de las novedades que existen: sujetadores adaptados que no es lo mismo que ortopédicos, o asillas de alivio que ayudarán para no sobrecargar espalda y cervicales. Muy por el contrario de lo que se puede pensar los que se denominan "push up" no pretenden engañar a la vista de nadie con el volumen del pecho, la intención es realzar y compensar. El ejemplo claro es el tan popular "Wonderbra", al que los entendidos consideran uno de los mejores inventos que ha hecho la industria textil.

Cada vez nos preocupamos más por ir bien vestidas por dentro, coordinando piezas, sintiéndonos cómodas y seguras, por ello se abre el abanico en lo que a diseño, formas y materiales se refiere. Para las braguitas la tendencia nos lleva hacia los "culotte", son favorecedores y mucho más cómodos que los tangas que causaban furor hasta hace bien poco. Si lo que se pretende es estar más sugerente, la forma brasileña de encaje que decora con la blonda el entorno de la cadera será siempre un acierto. En materiales se ofrecen muchos de alta calidad como el elastano o la microfibra, sin embargo el más aconsejado es el algodón. Tanto de unos tejidos como de otros es recomendable que estén bien cuidados, que se procure lavar a mano, y en caso de hacerlo en la lavadora sea en bolsas de red con lavado corto y sin usar suavizante.

Las piezas por excelencia: los "bodys", corsés y corpiños, se usan más de lo que se puede imaginar, ayudando a resaltar la figura femenina. Mientras que las combinaciones lenceras de anchos encajes, los picardías muy cuidados o los delicados ligueros son de esas prendas para usar también de día.

La coquetería hace que nos decantemos por el tono visón para evitar que se transparente, eso es causa del desconocimiento. Los profesionales garantizan que el color chocolate, vino tinto o rojo ni tan si quiera dejará intuir lo que escondemos bajo vestidos claros. Cuando los que eligen son los caballeros suelen preferir el color blanco y como segunda opción el negro.

A la hora de cubrir las piernas los pantys hacen una buena función y las medias, que llegan a mitad de muslo, permiten usarse tanto con falda como con pantalón. Quien las modele decidirá (según momento, compañía y situación), si las llevará con trabillas o no.

La luz del blanco, la oscuridad del negro. La pasión de rojo, la esperanza del verde. La delicadeza del encaje, la sensualidad de la seda, la comodidad del algodón. Hoy harán la corsetería que esconde nuestros secretos.