Improvisación, frescura y energía son algunas de las sensaciones que produce el quinteto tinerfeño Knajaz (Canallaz) cuando se junta para actuar en directo, oportunidad que propone hoy a los amantes del jazz latino con el concierto que ofrecerá, a partir de las 21:00 horas, en la sala Espacio Guimerá de Santa Cruz. La entrada solo costará cinco euros.
Este grupo de amigos, implicados en diferentes proyectos que van desde Los Sabandeños hasta Maquinaria Band, o la Big Band de Canarias, están unidos por unas inquietudes musicales que se mueven entre los ritmos afrocubanos, latinoamericanos y brasileños.
Pablo Díaz (flauta travesera) comentó que lo que le une a Moisés García (bajo), Pablo González (piano), Roberto Amor (batería) y Víctor Fernández (congas), es que son amigos y comparten gustos musicales.
"Todos somos amigos y coincidimos en proyectos musicales diferentes. Nos une el jazz latino. Empezamos a tocar hace unos tres años y montamos los temas que nos gustan de artistas conocidos como Dizzy Gillespie, Chucho Valdés, Paquito D´Rivera o Mario Bauzá, entre otros muchos. Por ahí van los tiros. Hicimos unos arreglos y empezó a caminar el proyecto. La intención es que esto camine más en breve".
Las jazz session que se hacían en el Ekade de La Laguna fueron el foco que alumbró esta iniciativa que les impulsó a tocar juntos. "Todos somos de la nueva generación de jóvenes músicos canarios y, sobre todo, nos gusta la improvisación, la frescura, la energía. Ese es nuestro sello, y mucha fusión de ritmos latinos y jazz".
Knajaz, ya habituales en los festivales de jazz del Archipiélago, es la síntesis de cinco talentos cuya propuesta está cargada de la impronta personal de cada uno de sus componentes. Todos ellos tienen formación musical académica o la están recibiendo.
Pablo González colabora con grupos de salsa y con un coro de gospel. Toca con casi todos los que se lo proponen. Moisés García lo hace con Maquinaria Band y otros grupos cubanos, además de estudiar el bajo en el Conservatorio.
Pablo Díaz estudió en el Conservatorio y luego se fue a París. Procede del mundo de la música clásica, de la Joven Orquesta Sinfónica. También hizo música moderna y desde hace una década forma parte de Los Sabandeños, además de tocar en la Big Band de Canarias y en un grupo de música cubana.
Roberto Amor, que acompaña a cantantes como Esther Ovejero, está metido en diferentes proyectos jazzeros de Tenerife; mientras que Víctor Fernández también está en Los Sabandeños.
El concierto que ofrecerán hoy en el Espacio Guimerá, durante más de una hora, estará compuesto por una selección de temas de jazz latino de artistas conocidos, como los nombrados anteriormente, pero con unos arreglos propios que reflejan su particular visión de estos ritmos, y una bossa que ha sido compuesta por Pablo Díaz.
Este ilusionante proyecto supone para estos músicos una especie de desahogo, una especie de "liberación", porque sus colaboraciones están adaptadas a los ritmos de otras formaciones, en las que también se sienten muy a gusto.
Con respecto a la situación del jazz en las islas, Díaz defiende la idea de que "en Canarias hay como un auge del jazz en general, del jazz latino y de la música cubana. Ahora mismo hay un montón de grupos. Creo que hay mucho futuro porque hay muchos jóvenes que están despuntando. Se ve que hay una generación de músicos potente, aunque muchos están fuera, pero vuelven".
Pablo
Díaz
flauta travesera y portavoz de knajaz