Llegar a uno de los palacetes más bonitos que hay en Tenerife puede enamorarte desde que pones un pie dentro, cuando observas cada obra de arte, cada escultura, todas las pinturas y muchos de sus muebles de maderas nobles. Cuando la mirada cae del techo, con anchas molduras, al suelo, el mobiliario parece difuminarse, casi desaparecer, porque a nuestros pies hay verdaderas piezas con historia. Pisamos los suelos hidráulicos que hoy son el deseo de los amantes del diseño, y la sensación de placer es la que recorre el cuerpo al andar con paso seguro.

Las baldosas de mosaico hidráulico son verdaderas maravillas de lo artesanal. Hay quien conserva las originales de las construcciones, que nacieron a finales del S. XIX -las primeras referencias son de 1857- en el sur de Francia, que se fabricaron con moldes metálicos -trepas- para separar los colores que forman el dibujo, fijados en cemento comprimido, utilizando como herramienta principal una prensa hidráulica. El acabado que tiene cada una de las piezas es bastante poroso, por lo que necesita protegerse con una capa impermeable, haciendo que sea resistente, antideslizante y muy fácil de mantener. El espesor y profundidad del dibujo permite pulirlo sin miedo a perder las formas recuperando el brillo del principio. En la actualidad se procuran diseños que parezcan antiguos, incluso haciendo réplicas exactas de modelos originales en el mismo material o con acabado vinílico (PVC). Tanto los suelos hidráulicos de cemento como los de vinilo pueden combinarse con otros revestimientos, mármol o madera principalmente.

En sus inicios este tipo de pavimento sustituía la piedra natural, normalmente se fabrican con una medida de 20x20cm. Hasta los años 70 estuvieron muy de moda, durante un tiempo pasaron a un segundo plano, hoy se han posicionado como una de las opciones más interesantes. Los diseñadores proyectan figuras, básicamente geométricas, arabescos, clásicos, rústicos, florales o vegetales, que deben estar meticulosamente colocadas ya que el dibujo podrá simular las alfombras más cuidadas en la zona central para ser enmarcada con grecas o cenefas.

Cada vez que tengas la oportunidad de pisar sobre un suelo hidráulico presta atención a tus pies y disfruta de su encanto natural.