El informe "La lectura en España", que ayer presentó la Federación de Gremios de Editores de España, no escribe páginas demasiado optimistas. Este estudio pone de manifiesto la incidencia que ha supuesto la crisis en el sistema bibliotecario español y plantea la necesidad de abordar planes autonómicos de lectura que promocionen y estimulen este hábito desde la etapa escolar.

Eso, a pesar de que renglones como el de la edición siguen incrementado la nómina de títulos y crece el capítulo de los conocidos como "lectores frecuentes", que así se califica a quienes leen al menos una vez por semana.

Lo cierto es que desciende el número de bibliotecas y, paralelamente, el de visitantes a estos espacios, por tanto se contabilizan menos préstamos; se reducen los horarios de apertura y se registra un envejecimiento de las colecciones, tal y como detalla la letra del informe.

Los lectores de libros, mientras tanto, se "deshojan" entre quienes consumen otro tipo de soportes más al uso: periódicos, cómics o páginas webs. Además, esta fragmentación y diversificación de la oferta y un fenómeno como internet han repercutido en los modelos de negocio, una circunstancia que se percibe en la implantación de la fórmula de la autoedición y en la readaptación del gremio de los libreros, obligados a repensar su continuidad.

El informe también pone el acento en el plano formativo y señala la educación como pieza clave, especialmente tras la aprobación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce). Así, explica, mientras la Ley Orgánica de Educación (LOE) establecía un tiempo diario de lectura "no inferior a treinta minutos", en la Lomce la asignación temporal se ha limitado y ha quedado incluida en una serie de "elementos transversales", subraya.

Respecto a Canarias se hace preciso acudir a la explotación del Instituto Canario de Estadística (Istac) para esbozar un guion que no difiere del panorama nacional.

De 2010 a 2014, los "clientes" de bibliotecas se redujeron un 13% (exceptuando el caso de Tenerife) y los libros inscritos en el ISBN cayeron de 2011 a 2015 un 24,5%.

Y no es un relato de ficción.

Islas 2010 2012 2014

Lanzarote 477.217 482.454 124.691

Fuerteventura 98.277 106.489 112.356

Gran Canaria 3.986.514 3.388.502 2.992.834

Tenerife 3.646.884 3.736.664 3.921.941

La Palma 62.717 70.429 54.254

La Gomera y El Hierro - 17.460 15.337

Total 8.287.977 7.751.998 7.221.413

Formatos 2011 2012 2013 2014 2015

Soporte papel 760 650 809 691 531

Otros soportes 172 297 242 189 182

Total 932 947 1.051 880 713

Estancamiento de la lectura

El presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), Daniel Fernández, presentó ayer la edición 2017 del informe "La lectura en España", donde se analiza en qué situación se encuentra la lectura, así como aquellos elementos que contribuyen e influyen en el desarrollo de los procesos lectores, desde la producción de títulos a su difusión y promoción. Como explicó Daniel Fernández, el informe es "en parte, el paisaje tras la batalla de la durísima crisis económica y social que hemos sufrido en estos últimos años. Una crisis que, en el caso del libro, ha implicado que los hábitos lectores de los españoles no hayan experimentado el fortalecimiento que desearíamos". Esta publicación parte del convencimiento de que la lectura tiene una importancia trascendental en el desarrollo y progreso social de los países, por lo que su fomento debe formar parte de las políticas culturales de un país. El informe apunta que desde el punto de vista de la oferta cultural, al menos cuantitativamente, la edición española se sigue caracterizando por un fuerte pluralismo y una rica bibliodiversidad.