Más allá del encanto que tienen los tejidos, los patrones y las formas, la moda une la estética con los seres humanos que han visto frustrados sus sueños o menguadas sus ilusiones. Incluso aquellos que han sido capaces de lo que el mundo nunca les creyó capaz. Además de los bocetos, los focos y las pasarelas, hay firmas dando puntadas para ayudar a las personas más desfavorecidas y al final ganar todos.

Teniendo muy claro que se crea moda con propósitos, el Cabildo de Tenerife -su vicepresidente Efraín Medina, como principal impulsor- acercará hasta la Isla el producto delicado que surge de las técnicas artesanales más antiguas de Colombia, de la mano de Juan Pablo Socarras, así como los nudos y tintadas de este país con la fuerza y energía que le pone Natalia Botero. Ambos diseñadores tienen en común la profesión, el lugar de origen, el fin solidario que les motiva a fabricar cada prenda y su participación en la Feria Internacional de la Moda; Botero el día 30 de Marzo en el IX Concurso de Jóvenes Diseñadores, con su marca Entreaguas, y Socarras mostrará la colección "Los viajes de Máxima Manjarrez" , el 2 de Abril, en la Pasarela Internacional.

"Yo no vendo un producto, yo vendo historias hechas a mano", señala como carta de presentación el creativo Juan Pablo Socarras, quien arrancó hace once años un proyecto donde trabaja con población vulnerable de Colombia; indígenas, "afrodescendientes", población desplazada, reinsertada... Por su parte, la firma Entreaguas lo hace con personas que tienen síndrome de Down y da la oportunidad a mujeres que tienen hijos con parálisis cerebral para conciliar su vida laboral y familiar desde sus hogares, facilitándoles el transporte de los hilos, cuerdas y pigmento con los que se elabora el macramé. "Ninguno de nosotros solo es mejor que todos juntos", afirma Botero.

El encanto de cada una de las prendas que se crea manualmente con las tradiciones más arraigadas del país se mantiene por el respeto de los creativos y los conocimientos de los artesanos. "Lo que hago es moda sostenible para ellos, para que a través del diseño ganen calidad de vida, no dándoles dinero sino trabajo y enseñándoles a mejorar su producto. Estas comunidades son mi día a día, aprendí de la vida lo que es viajar por Colombia, trabajar con los artesanos, hasta llegar a Tenerife por esto", asegura quien ha llevado la labor solidaria hasta el punto de poner su nombre a la Fundación Juan Pablo Socarras Yani.

Sin perder de vista la artesanía, la evolución está servida. "Ahora estoy en el proceso de cambiar la marca, que sea un poco más comercial y sostenible, para los artesanos y para mí, que existan piezas en ediciones limitadas con cantidades suficientes para que el mundo se enamore" apunta Socarras. Botero, por su parte, se refiere a los nuevos retos de la Fundación Entreaguas. "Vamos a sacar unos productos trabajados con retales que teñirán los artesanos. Todo lo que produzcan será para ellos, lo comercializaremos por nuestros canales y otros que también están interesados".

Los proyectos de ambos diseñadores han ido creciendo a pasos agigantados. La firma que lidera Socarras registra desfiles en las pasarelas más importantes: Nueva York, Milán, Miami... Mientras, Entreaguas avanza con la inauguración, esta semana, de su nueva tienda. Ambos llevan tiempo luchando por conseguir un país diferente, a través del diseño, y hoy sienten que el mundo se está enamorando de la cultura colombiana.

Podemos saborear, desde la lejanía, la alegría de los azules, corales o turquesas y la serenidad del gris plomo o el negro que se desprende de las piezas que anuda Entreaguas. "Es muy agradable poder ser una de las fuentes que genera estabilidad. Soñamos con la experiencia que nos regalan unas tradiciones cada vez más próximas. Para mí ha sido muy emocionante trabajar con mujeres desplazadas por la guerrilla. Me han enseñado a respirar, a agradecer, a comer, a viajar, ...", confiesa Juan Pablo Socarras.

A escasos días de llegar a Tenerife, los dos diseñadores se muestran satisfechos con su participación en la Feria Internacional de la Moda y el reconocimiento que ello supone a su producto y, sobre todo, a la labor social que hay detrás.