Confiesa un regreso a un plano más acústico, una vuelta a lo "no esperado" para construir canciones que se alejen de las obligaciones comerciales. "En mis primeros discos metí el piano, luego lo quité y tiré de la guitarra eléctrica para ser un poco más rockero y, ahora, estoy en una fase acústica", enumera Leo Minax horas antes del concierto que hoy ofrecerá con "Mistoquente" en el marco del ciclo "Pasionari@s" que organiza la Fundación CajaCanarias. "Son algo más que músicos; son amigos y artistas de referencia que nos hemos unido en torno a un proyecto común", exalta en relación a los aliados que sumó para construir su nuevo álbum. "No lo podemos llevar a Tenerife porque hubo un ligero retraso en las mezclas, pero los temas van a sonar igual", adelanta sobre una actuación en la que estará acompañado por Borja Barrueta (batería), Moisés Sánchez (piano) y Vic Molines (bajo), que en esta ocasión sustituye a Pablo Martín Caminero.

"En Treinta se concentran todas las vivencias que acumulé desde que resido en Madrid", avanza Leo Minax en el transcurso de una conversación telefónica en la que remarca que "siempre es un placer volver a una tierra tan cálida, a un lugar en el que encuentro cosas que me unen a Brasil", puntualiza en un perfecto castellano un artista que nada más pisar suelo español se sintió atrapado por una de sus raíces musicales más tradicionales. "Al llegar a España quise aprender flamenco, pero desistí porque no tenía la destreza que necesitaba para tocar bien la guitarra española", añadiendo que "ahí fue cuando decidí volver a la música brasileña", recupera de una decisión que se remonta al ecuador de la década de los 90. "Soy madrileño de adopción, pero no me importa confesar que las veces que viajé a las Islas percibí una energía especial; una conexión invisible que va más allá de lo musical: la forma de ser de la gente que vive en Canarias me traslada a una realidad conocida", asegura.

Leo Minax admite haber transitado por distintas fases a la hora de crear y moldear sus canciones. "El castellano me proporcionó una perspectiva del oficio de cantautor que no tenía antes de viajar a Europa", agradece sobre un proceso de adaptación que, a su vez, le hizo mirar con otros ojos lo que dejó en su patria natal. "Tuve que abandonar mi país para darme cuenta de que de no conocía los latidos de la música brasileña. Que había cosas que no sabía porque ahora estaba al otro lado".

De la fusión, un ingrediente indispensable en su música, el brasileño no esconde que "ese es un asunto que siempre va a tener algunos detractores. Sobre todo, en el mundo del jazz... Las canciones siempre tienen que tener algo más, necesitan ofrecer un punto de vista distinto para complacer a muchas personas. La historia debe ser importante, pero los elementos que usas para contarla y cómo lo haces también son fundamentales", aconseja.

Minax reflexiona con pausa sobre algunas cuestiones que están unidas a su yo artístico. "Soy más músico que cantante, más músico que cantautor e inevitablemente eso pesa mucho a la hora de escribir una canción... De la misma forma que algunos aseguran que el poeta nace, el músico también nace", compara un ser que en la actualidad tiene la certeza de sentirse un cantautor en su sentido más literal. "Me gusta jugar con la música", introduce cuando en el diálogo correr riesgos se convierte en un asunto de análisis.

"Mi plenitud como creador solo alcanza sus niveles más elevados cuando coqueteo con esos giros de los que me habla, de las melodías, de los ritmos... Hay que sorprender al público, que no te vean llegar", explica sobre el fraseo que aparece cada vez que se enfrenta a la audiencia. "El salto al vacío de la improvisación es una sensación gratificante. Antes de acabar, Minax realiza una última advertencia. "Puede que este sea mi disco más imprevisible... Las probabilidades de que la gente que me conoce se sorprenda son elevadas, pero este es el álbum que quería hacer en estos momentos. Es un trabajo con el que celebro mis 30 años en España que requería la buena compañía de Mistoquente, porque una ocasión como esta hay que prepararla bien", reivindica un cantautor que mantiene intactos la ilusión por seguir jugando con la música y las palabras.

Concierto: 21 de abril.

Lugar: Espacio Cultural de CajaCanarias (Santa Cruz de Tenerife).

Hora: 20:00.

Vea aquí el videoclip del tema "Causa y efecto" interpretado por el cantautor brasileño Leo Minax.