La creadora tinerfeña Carmen Cólogan exhibirá la muestra "Jardines del desierto" del 15 de septiembre al 15 de octubre en la Galería Bab Rouah de Rabat y del 27 de octubre al 27 de noviembre en el Centro de Arte Moderno de Tetuán gracias a un proyecto de internacionalización artística en el que colaboran el Cabildo de Tenerife y Canarias Cultura en Red.

La consejera de Acción Exterior, Delia Herrera, y el director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Clavijo, presentaron esta iniciativa junto a Carmen Cólogan. Carmen Cólogan detalló que esta exposición, que cuenta con más de treinta piezas, también ofrecerá talleres y coloquios artísticos de forma paralela. Sobre el título de la muestra, comentó que, aunque parezca paradójico, el desierto tiene vegetación.

Cólogan recordó que en Marruecos también hay dragos, algo que le ha servido para encontrar similitudes entre ambos paisajes. "Un desierto no está desértico. He visto árboles frondosos en el desierto de Marruecos: es verde y frondoso, no solo arena. He querido hacer hincapié en esto".

Esta exposición, comisariada por Eliseo G. Izquierdo, ha sido organizada por la Embajada de España en Rabat (Marruecos) y el Ministerio de Cultura y Comunicación de Marruecos, cuenta también con la colaboración del Instituto Cervantes de Marruecos.

En el marco de la exposición se prevén otras actividades culturales, visitas guiadas y la realización de un taller de pintura a manos de la artista, donde, a través de una metodología con ejercicios prácticos, se abordarán nuevos modelos pictóricos del paisaje, explicó la creadora lagunera.

"Desde las islas, al otro lado del Atlántico, se divisan entre las arenas rojizas del desierto grandes columnas de arbustos, bosques que tapizan lienzos y un territorio que transforma el paisaje en una nueva mirada al mundo".

Esta visión, interpretada y transformada siguiendo una iconografía artística peculiar a base de dragos, palmeras, olivos, plataneras, cedros y arganes, es la que el Reino de Marruecos acogerá el próximo otoño como país anfitrión de la obra de Carmen Cólogan.

Jardines traídos por el viento

El comisario de la exposición Eliseo G. Izquierdo reflexiona sobre la propuesta de Cólogan y afirma: "¿Cómo puede el desierto sembrar un bosque? ¿Cómo una isla albergar jardines traídos por el viento? Oasis en el páramo oceánico, tan yerma en su vecindad como fértil en caminos y

sustratos, la isla ofrece parada y reposo a las arenas y semillas

llegadas en viaje aéreo a través del mar. Retenidas lentamente por

el escollo inesperado del breve territorio insular, acumuladas sobre

su corteza, la enriquecen y alimentan, la transforman y moldean.

De este proceso prolongado nace el bosque en la isla".

"Es este mismo proceso de aparición gradual, mediante el paciente

trazado de líneas germinales, el dibujo de troncos y de hojas, o la

emergencia de luces, sombras y colores, el que intuye Carmen

Cólogan en una serie de obras necesariamente inconclusas.

Pinturas invitadoras al cultivo de la mirada y al descubrimiento del

porvenir, aquel que aguarda por ser encontrado entre el ramaje

sugerido de estos esqueletos de arboledas crecidos sobre el

lienzo, antes extensión inhabitada, desértica. Ahora, fragmento de

isla imaginada que acrisola los materiales llegados desde los

mares de arena, donde crecen arganes, dragos y olivos, los cuales

regresan de nuevo, recreados como jardín, a su origen probable".