Ha sabido encajar su formación clásica en un universo tan cambiante y futurista como es el de los videojuegos, un sector para el que ha escrito partituras que acompañan la acción de los personajes de "Diablo III", "Starcraff 2" y "World of Warcraff". "Mi música se adapta bien a la épica que envuelve a esos mundos tan complejos y legendarios", dice la compositora y directora de orquesta irlandesa Eímear Noone horas antes de debutar en el XI Festival Internacional de Música de Cine de Tenerife. "Este Fimucité me lo han hecho a medida", agradece la autora de las melodías con las que Nintendo promocionó "The Legend of Zelda". Noone codirigirá mañana -Trevor Jones ejercerá como director invitado-, a las 20:00 horas, en el Auditorio de Tenerife a la OST en el concierto "Espada y brujería: crónicas sinfónicas de una era legendaria".

¿Qué se ha encontrado en su primera experiencia en Fimucité?

Me llama la atención en concepto familiar, el trabajo duro y, sobre todo, la pasión que Diego Navarro, desde la dirección de Fimucité, y Pedro Mérida, en la producción, transmiten a sus colaboradores. Para mí es un placer formar parte de sus planes, de la actualidad de un festival que tiene una gran acogida entre el público. Todo ese amor y cuidado que ellos ponen en lo que hacen es lo que ha propiciado que el festival tenga un sello propio, una proyección internacional que no para de crecer.

Entiendo que una vez en la Isla las expectativas que tenía alrededor del festival han quedado cubiertas, ¿no?

Diego Navarro es un profesional respetado y tiene una gran reputación mundial, pero no me esperaba encontrar este ambiente tan familiar dentro de un festival en el que se mueven unos elementos de esta magnitud. La agenda es amplia y de calidad. El sábado tuve la oportunidad de disfrutar con la música de Tarantino y me lo pasé fantástico. No es fácil encontrar un gran proyecto cultural que transmita tantas emociones como este.

¿Cuáles son las claves del concierto de mañana?

Es un programa en el que está reflejado un mundo de fantasías y leyendas. Un concierto de perfil sinfónico en el que existen elementos de rock y hasta una instrumentación medieval. La voz de Cristina Ramos es maravillosa y, además, me siento una privilegiada por poder dirigir la música de Trevor Jones. Eso es un sueño hecho realidad en una noche en la que el público podrá experimentar sentimientos tan opuestos como la risa o el llanto... Entre todos vamos a crear una atmósfera tan especial que va a resultar muy complicado que alguien se quiera marchar de ella. La forma que tiene el Auditorio, que se parece con el casco de un guerrero, se va a adaptar al espíritu heroico que trataremos de introducir en los espectadores que acudan a "Espada y brujería: crónicas sinfónicas de una era legendaria".

¿Componer música para videojuegos ha modificado su visión respecto a estos proyectos de entretenimiento?

Mi formación musical es clásica y siento una gran atracción por las sinfonías de Mahler, pero este es un mundo lleno de oportunidades en el que la tradición y las nuevas tecnologías te permiten crear música a gran escala... Es verdad que incorporar el sonido de una orquesta a un proyecto de estas características era algo impensable hasta hace poco tiempo, pero las cosas evolucionan y ahora es un mercado que debemos aprovechar: a medida que se complica la trama de un videojuego, más compleja tiene que ser su música.

¿Vamos, que unas sonoridades tan cuidadas y estudiadas no se conciben para el FIFA 18?

No... (sonríe). No creo que este tipo de música les vaya bien a los videojuegos de deportes.

¿Cómo afecta la épica a la hora de sentarse a escribir una de sus partituras?

Lo épico, fantástico y heroico lo condiciona absolutamente todo a la hora de afrontar una aventura de estas dimensiones. Yo suelo trabajar con diseñadores de Blizzard Entertainment y la mayoría de sus creaciones me recuerdan a obras de arte de Dalí... Cuando veo esas imágenes en lo único que pienso es en crear algo que esté a la altura de esa calidad. Los creativos son agradecidos a la hora de valorar que no te quedes en lo más sencillo, sino que busques siempre dar un paso más que nos acerque a la perfección. En el sector del videojuego se tienen muy en cuenta los pequeños detalles y eso es algo que también afecta a la composición musical.

¿En un segmento del ocio que se está renovando de forma permanente, la música está obligada a explorar nuevas vías de creación?

Las nuevas tecnologías y todo lo que tiene que ver con la realidad virtual condicionan el trabajo de los compositores. Ver cómo uno de esos personajes de videojuegos se mueve con mi música es una sensación gratificante, pero aquí no te puedes quedar con lo que has hecho sino buscar el siguiente reto... Es como ir superando niveles cada vez más complejos.

¿Qué sensaciones le produce esta colaboración con los músicos de la Orquesta Sinfónica de Tenerife?

Lo primero que me gustaría destacar es lo duro que resulta trabajar con un repertorio tan complicado y variado. Para poder ejecutar un concierto de esta magnitud es necesario contar con un grupo de calidad y unido. Además, es un concierto en el que habrá numerosos estrenos mundiales y eso lo complica todo un poco más.

En los dos últimos conciertos de esta edición habrá una generosa dosis de fantasía y terror: el público pasará de unas crónicas sinfónicas legendarias a la "Galería Nocturna de Stephen King". ¿Dos universos en los que usted se siente cómoda?

¿Cómo me voy a sentir si la fantasía y el terror son dos de mis géneros favoritos? Este Fimucité me lo han hecho a medida. No me van las comedias románticas y eso es algo que se percibe en mi música. He bailado al ritmo de Tarantino, la música de Almodóvar tiene una sensibilidad especial y ahora llega una sesión doble de composiciones asociadas con la fantasía y el terror. Dirigir este concierto y estar como espectadora en el de Diego Navarro es un sueño que justifica las ilusiones que empezaron a crecer en cuanto escuché la música de "Willow" siendo una niña. Ahí fue cuando me di cuenta de que eso era lo que yo quería hacer. Esto es como si alguien te regalara un cassette o un cd con tu música favorita para que la interpretes en un gran auditorio, al frente de una magnífica orquesta y ante un público que ama a Fimucité.