Vanesa Martín tiene un lema, "vivir en el aquí y en el ahora", un lugar desde el que quiere componer nuevos temas que reflejen la realidad social y hablen del amor "sano": "Mis canciones no son cursis, hay un mensaje de igualdad", dice la malagueña, que mañana pagará una "deuda" a su público de Madrid.

Después del varapalo que le supuso la cancelación del concierto que iba a ofrecer el pasado 16 de septiembre en la Plaza de Toros de Las Ventas por problemas administrativos del coso con el Ayuntamiento, Vanesa Martín (1980) tirará mañana "la casa por la ventana" en el WiZink Center.

En el concierto compensará "con creces" a sus seguidores y será, promete en una entrevista con EFE, "inolvidable".

"Van a ocurrir más cosas de las que ya iban a suceder, porque basta que me digan que no a algo para que yo lo coja con más ganas", subraya la cantante, que acaba de publicar "Munay vivo", un DVD que recoge su actuación en la Malagueta el pasado verano y refleja "la verdad" de lo que está siendo para ella la gira.

Todavía sin asimilar que ha cantado en el Teatro Metropolitan de Ciudad de México y que llenó el Gran Rex de Buenos Aires, Martín siente que "Munay" le ha llevado a cumplir sueños, como el de compartir escenario con Joaquín Sabina en el Luna Park, y a descubrir que tiene "cada vez más claro" cómo quiere sonar.

"Quiero un sonido orgánico y moderno en el que no haya mucho ruido para que el mensaje de las canciones prevalezca por encima de todo", revela la cantautora, que confiesa una marcada tendencia a huir de los "artificios" y un mayor interés en "desnudarse" musicalmente.

Para lograrlo y salir de la "zona de confort", la autora de "Sin saber por qué" o "La piel" también quiere detenerse más en "las realidades que nos rodean", porque, señala, ella es "una persona que siente y padece todo lo que está ocurriendo".

Tanto es así que ya ha intentado componer una canción que hable del fin de la violencia y abordará en sus próximas canciones asuntos de carácter social, como los que ya ha tocado en su libro de poesía, "Mujer océano", donde habla, por ejemplo, del drama de los refugiados.

"Es mi asignatura pendiente. He intentado hacer varias canciones, pero el mensaje era muy contundente y la melodía no me acompañaba. Quiero que la letra se vista adecuadamente y no sonar oportunista", detalla la malagueña.

En su último trabajo discográfico ya se ve reflejada esa preocupación por expresar su filosofía de vida a través de la música con temas como "Hablarán de ti y de mí", una historia sobre el "empoderamiento" femenino y la "lucha" para equiparar las condiciones entre hombres y mujeres.

"Nos queda camino por hacer y hay que conseguir la igualdad de todas las maneras, en todas las profesiones", sostiene Martín, que recalca su interés por hablar del amor desde la posición "de una tía independiente", desde la mirada de una persona "que no se conforma con historias que no llevan a ningún sitio, que no te arrancan una sonrisa o no te hacen crecer".

Por eso, cree que sus canciones no resultan "cursis", porque en todas las letras hay "un mensaje de igualdad, de crecimiento, de quererse y de respetarse".

Sobre esos cimientos construirá los temas de un próximo álbum que ya está en camino, pero que aún no tiene fecha de salida porque, cuando llegue el fin de la gira, quiere "parar un poco y descansar", con el objetivo de conseguir "un buen disco que sacar a pasear".

"A nivel personal estoy muy tranquila, me noto con una dosis extra de serenidad. Quiero disfrutar del día a día y reírme mucho", concluye.