La actriz Concha Velasco, que esta mañana ha anunciado en Valladolid su despedida del teatro con "El funeral", escrita y dirigida por su hijo Manuel Marsó, ha elegido una comedia "para todos los públicos" en la que encarna el fantasma de una actriz vieja que repasa su trayectoria.

"Pienso que me voy a despedir con esta obra, tengo 78 años y me voy a cortar la coleta", ha afirmado en una rueda de prensa la actriz, que compartirá protagonismo con Antonio Resines en un duelo interpretativo que culminará con un monólogo donde la actriz insinuará a los espectadores la decisión anunciada.

Velasco (Valladolid, 1939), en posesión de dos Premios Nacional de Teatro (1972 y 2016), se ha decantado por el género de la comedia, una "función blanca", para decir adiós a todos los públicos que durante las últimas décadas han seguido su estela en el cine, teatro, televisión, revista y danza.

"Sí creo que va a ser el definitivo. Quería terminar con algo divertido y hacerlo con Manuel (Marsó Velasco), mi cómplice y amigo desde que nació", ha añadido durante una intervención emotiva que ha salpicado de recuerdos y anécdotas, especialmente vinculados a su familia y a su ciudad natal.

En Valladolid recogerá este sábado la Medalla de la Ciudad que añadirá a los numerosos reconocimientos atesorados durante los últimos años en los que ha prestado su nombre a una calle y a un teatro.

"Es una bestia, una todoterreno cargada de energía", ha explicado el director de "El funeral", una comedia "loca, disparatada, técnicamente complicada, con numerosas referencias cinematográficas y ese monólogo final" cuyo contenido ha sugerido y ha estado a punto de descubrir la propia protagonista.

Será la última gira de un actriz que debutó como artista en la película "La reina mora" (1954), llegó al corazón de los españoles de la posguerra con "Las chicas de la Cruz Roja" (1958) y alcanzó la máxima popularidad con la chica ye-yé en "Historias de la televisión" (1965).

"Va a ser la última si Dios quiere y tiene éxito. Quería terminar con una cosa divertida", ha insistido delante de un Antonio Resines, con quien compartió rodajes en "La colmena" (1982) y "El oro de Moscú" (2003) y que la ha catalogado como "una de las mejores actrices de este país, si no la mejor dicho objetivamente".

La primera felicitación ha partido de Resines, fascinado por la vitalidad de Concha Velasco que, con 64 años de carrera, "aún sigue trabajando; es asombroso, algo complicadísimo que, como mínimo, tiene un mérito enorme", ha apostillado.

Velasco, que entre otros directores teatrales ha recordado a José Carlos Plaza, con el que más veces ha trabajado, ha espigado entre las obras y papeles protagonizados los que hizo en "Hécuba" (teatro), "La colmena" (cine) y "Hello Dolly" (musical), y recordado entre sus autores predilectos a Antonio Gala y a su esposo y productor Paco Marsó, fallecido en 2010.

No es la primera vez que Manuel Marsó dirige a la actriz viva más prolífica de la escena española, ya que la tuvo a sus órdenes en el cortometraje que rodó como práctica final cuando se diplomó en la Escuela de Cinematografía de la Comunida de Madrid (ECAM) y que estrenó en una Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).

Concha Velasco, después de la reciente y exitosa gira con "Reina Juana", afronta ahora "El funeral" que compatibilizará con su labor de presentadora televisiva y con un rodaje en ciernes.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, anfitrión de la rueda de prensa, ha justificado la Medalla de la Ciudad que prenderá a Concha Velasco en la aspiración de "devolver un poquito de lo mucho" que ha dado a la ciudad.