El cineasta catalán José Luis Guerín (Barcelona, 1960) compartió con alumnos del ciclo de Artes Escénicas del IES Los Cristianos el taller "Legados de la puesta en escena", incluido en el II Aronías. Encuentro Internacional de Cineastas en Arona, organizado por el Ayuntamiento. Ayer también impartió una charla en el Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz promovida por socios del Clúster Audiovisual de Canarias y la SGAE.

Este Premio Nacional de Cinematografía, que se mantiene ajeno a todo lo que puede relacionarse con el mundo del cine oficial, incluida la Academia, tildó de muy interesante su experiencia con los estudiantes, a los que no quiso aturdir con referencias al cine que le gusta, sino compartir con ellos una serie de reflexiones sobre la imagen y el sonido, darles elementos de juicio para que puedan disfrutar más de las películas. Sembrarles el gusto y la curiosidad por el lenguaje y la expresión cinematográfica, porque es una escritura y posee un alfabeto para "escribir" con imágenes.

"Nunca había hecho un taller con gente tan joven, normalmente lo hago con profesionales o personas que están estudiando cine. Ha sido una nueva experiencia que te obliga a repensar tu oficio, ciertos conceptos. Confrontar ideas con personas muy jóvenes en torno al cine, que tienen un imaginario muy distinto al mío, porque han visto muy pocas películas , ha sido un reto interesante y lo he pasado muy bien. Espero que ellos también".

"Lo que te devuelven, a veces, es una mirada muy cálida, inocente, que te sitúa un poco en el principio, en el origen, y a no dar muchas cosas por sentadas, sino empezar en el a, b, c. Tienen una mirada limpia en un aspecto, pero por otra sucia por la influencia de la televisión y los mass media".

Este reconocido director, con una decena de películas a sus espaldas, realizadas con poco medios pero con mucho arte, un estilo claro, reflexivo y una fuerte vocación poética, confesó que cuando va a realizar un filme le gusta dejar un margen al azar.

"Si toda la película que voy a realizar está claramente escrita en un guion de arriba a abajo, pierdo el deseo de hacerla. El deseo de hacer una película tiene que ver con el deseo de la revelación. Quiero que la película me transforme a mi mismo también. El cine es un arte que siempre se ha movido entre dos polos, entre el control de aquello que organizas, que planificas previamente, y el azar, aquello que te encuentras, lo imprevisto".

Con respecto a la tendencia actual del séptimo arte, comentó que prefiere no saberlo. Bastante tiene con encontrar el suyo. "Lo que sí veo es que el cine en el pasado consiguió ser un gran arte popular y, además, iba muchísima gente a verlo. Eso se ha extinguido. Ahora el cine como industria ha tomado un camino y el cine como arte otro, y no se encuentran. Hay una herida profunda. Son dos caminos separados".

Guerín, admirador del cine clásico y de los grandes maestros de su historia, de lo que él denomina "cine artesanal", considera que hoy en día hay muchos grandes realizadores por el mundo, pero son desconocidos para la mayoría, excepto por los cinéfilos profundos, porque sus trabajos no entran en los cines comerciales, donde solo tiene cabida un cine impersonal, deshumanizado, de despacho y márquetin. Aunque internet ofrece alguna posibilidad de acceder a ello, pero no en un cine, sino en la pantalla del ordenador.

"Hay cosas muy buenas, pero no tienen la visibilidad que tenían antes. Te puedo hablar de siete directores chinos o cuatro coreanos, o franceses, pero nadie los conoce por desgracia. Antes todo el mundo conocía a Bergman, Antonioni o Keaton. Hoy es difícil. La globalización del mercado lo ha reducido muchísimo. Siempre digo que la censura franquista era menos agresiva que la censura económica de hoy. Se ha reducido muchísimo el número de películas y de nacionalidades con respecto a los años 70 y 80".

Guerín prepara otra película, una coproducción franco-belga-holandesa, aunque no descarta rodar alguna vez en Canarias. Como siempre buscará un espectador especial, que se relacione activamente con las imágenes, no un simple consumidor que solo se "enganche".

José Luis

Guerín

director, guionista y premio nacional de Cine