Cecilia Bercovich (Madrid, 1986) es una de esas intérpretes de su tiempo, concienciada con la escena local y defensora sin complejos de la música actual. "Los intérpretes de contemporánea no somos los hipsters de la música clásica", argumenta Bercovich para tratar de normalizar la convivencia de ambas tendencias.

Esta joven madrileña es una virtuosa del violín y la viola, siendo su talento para este último instrumento el que demostrará hoy en la Sala de Cámara del Auditorio de Tenerife Adán Martín, a las 19:30 horas, en "Zíngaros", el nuevo concierto de Quantum Ensemble.

El espectáculo, un homenaje a la música zíngara o húngara-gitana, que incluye obras representativas del uso que algunos compositores hicieron de esta fértil tradición musical, "será un concierto que le va a encantar a la gente". La también arreglista asegura que "Zíngaros" "marcará una estela de respeto renovado a este tipo de música que siempre ha llevado marcada un aspecto peyorativo en su nombre".

Para la intérprete invitada, el repertorio elegido ("Rapsodia húngara no. 9, S. 379-El carnaval de Pest", de Franz Liszt; "Contrastes Sz. 111, BB 1162 de Béla Bartók; y "Cuarteto en Sol menor nº 1, op. 25" de Johannes Brahms) "son obras con mucho dinamismo que dan un contraste agradable de carácter".

Los tres músicos que vertebran Quantum Ensemble, David Ballesteros al violín, Cristo Barrios al clarinete y Gustavo Díaz-Jerez al piano, estarán acompañados, además de por Bercovich a la viola, por el grancanario Ángel Luis Quintana al violonchelo. No es la primera vez que la intérprete madrileña, que profundiza en composición y dirección, toca con el conjunto de cámara residente de Auditorio de Tenerife.

"Me une a Quantum Ensemble un respeto profesional y la manera de hacer música, el afecto con el que nos dedicamos a esto", explica la artista.

Ella considera "fundamental" que el hecho de que un centro de arte público como Auditorio de Tenerife tenga conjuntos residentes como Quantum Ensemble: "Es una manera de atraer a la gente local a ver sus tesoros, tanto los músicos como el propio Auditorio de Tenerife, y que vayan desarrollando un hábito", explica la violinista, para la cual una de las claves radica en motivar "la curiosidad por la música en la gente".

La experta en cuerda asegura que "esa forma diferente de trabajar la música se nota, no necesita ser explicada, sino que se transmite de una manera directa", y por eso "dudo que alguien que venga a ver a Quantum no repita".

"Trabajar en Tenerife siempre es un gustazo, por eso venir a tocar con Quantum y encima en la Isla es todo un regalo", explica Bercovich, que forma parte del Trío Arbós (Premio Nacional de Música 2013) y es profesora del Centro Superior de Música Katarina Gurska de Madrid. Esta vez la visita será fugaz, pues la gira nacional de "Zíngaros" les impedirá contar con los habituales días de ensayos en la capital tinerfeña.

Los valores de Quantum a la hora de abordar la música han convertido en habitual que, una hora antes del concierto, haya una conferencia que profundice sobre el repertorio elegido, pero también que los músicos charlen con el público durante el descanso.

Esta es una de las partes que le encantan a Bercovich. "Disfruto mucho hablando con la gente y es muy especial que ellos compartan contigo a dónde los ha llevado la música: una sensación, un recuerdo, un pasaje de un libro? Es algo que me gusta mucho".