El novelista Javier Marías por "Berta Isla" y el poeta catalán Luis Bagué Quílez por "Clima mediterráneo" han sido galardonados hoy con los Premios de la Crítica que otorgan anualmente los críticos literarios a los mejores libros de narrativa y poesía.

Los premiados en lengua catalana han sido en narrativa "Els fills de Llacuna Park" (Los hijos de Llacuna Park) de María Guasch y en poesía "Convivència d''aigües" (Convivencia de aguas) de Zoraida Burgos, mientras que en lengua gallega los galardonados han sido Emma Pereira por "Bibliópatas e fobólogos" y Lupe Gómez en poesía por "Camuflaxe" (Camuflaje).

En lengua vasca los premiados han sido Aingeru Espaltza por "Mendi-joak" (Mal de altura) y Luis Garde por el libro de poesía "Barbaroak baratzean" (Bárbaros en el jardín).

El ponente del jurado José María Pozuelo ha señalad que "Berta Isla" (Alfaguara) es una "novela de gran altura en el contexto de la narrativa europea y supone una continuación del arco abierto en ''Tu rostro mañana'', de la que hereda algunos personajes".

Pozuelo ha añadido que la novela de Marías "se sirve del género del espionaje para hacer bajar al lector a las profundidades de la condición humana y con su original estilo combina reflexión y acción, al que añade momento líricos para entrar en grandes asuntos universales como el amor, los secretos, la impenetrabilidad del otro o la falta de ética de las cloacas del Estado".

El escritor y académico Javier Marías (Madrid, 1951) estaba situado a la cabeza de los favoritos de este año para un galardón que ya consiguió en 1992 con "Corazón tan blanco".

La novela ganadora de este año es la decimoquinta de Marías y transcurre entre 1969 y 1995 protagonizada por Berta Isla y su marido, Tomás Nevinson, que se convierte en espía.

El premio de poesía en lengua castellana para Luis Bagué Quílez muestra una obra que camina entre lo políticamente incorrecto con referentes de pinturas rupestres, las redes sociales, Velázquez, Don Quijote, el toro de Osborne o la alta velocidad e incluye una visión reflexiva y escéptica del mundo.

En el caso del premio en lengua gallega a Lupe Gómez, natural de Curtis (A Coruña), el jurado ha destacado de "Camuflaxe", su octavo libro, que "sobrevuela la voluntad de plantear un ejercicio mimético para identificarse con un entorno en el que se constata la desaparición del mundo rural y la fuerza de lo telúrico".

En narrativa gallega la coruñesa Emma Pedreira ha sido premiada por una obra que "abraza el género del relato corto para reflexionar de la presencia de los libros en la vida con humor e ingenio construyendo metáforas de nuestro tiempo".

El miembro del jurado Javier Rojo ha resaltado los premios en lengua vasca como el libro de Aingeru Epaltza, que supone un símbolo en el que "confluye el ansia de la libertad y los sentimientos de la fatalidad opresora", en el que aparecen amistad, arrogancia, envidia y pequeñas miserias de los personajes, mientras que de la obra de Luis Garde ha remarcado sus imágenes relacionadas con la idea de o muro que se construye en Occidente contra la llegada de inmigrantes.

En el caso de los premios en lengua catalana, María Guasch ha sido galardonada por una historia en la que una joven profesora de lengua en una prisión reconoce en la cárcel a una mujer. En poesía en catalán el premio a Zoraida Burgos ha sido para un libro que rescata toda su obra en un solo volumen.

Por otro lado, Neria de Giovanni, presidenta de la Asociación Internacional de Críticos Literarios, presente en el acto, anunció que el año próximo pondrá en marcha en Italia los primeros premios de la crítica de ese país cogiendo como modelo el de la Asociación Española de Críticos Literarios (AECL), para lo que invitó a su presidente, Ángel Basanta, a que colabore en su organización.