El romance entre Ros Jiménez y Roselinde nació en 2008. Hasta entonces los materiales y herramientas se dejaban querer por la creatividad de la mujer que sigue diseñando acompañada por el canto de los pájaros y los rayos de sol que se cuelan por la ventana de su pequeño taller. El incienso pone el aroma, y el café el sabor hasta llegar a la pieza perfecta.

Su imaginación no para, está hambrienta de nuevos diseños. "La inspiración puede venir de cualquier manera; en un viaje, una revista, una canción, un libro? a partir de ahí comienza el tiempo para documentarme, para crear una historia", afirma la diseñadora, cuyos trabajo tiene siempre muy presente el estilo ecléctico que lo hace ser diferente en un mundo cada vez más rico. "Mantenerse en el mundo de la moda y de los complementos no es nada fácil, hay mucha competencia. Hay que estar al día con las tendencias. Nosotros sacamos dos colecciones al año, con mucho trabajo creativo además de lo que viene después de lanzar una colección. Es un gran esfuerzo que hemos logrado en estos diez años", aclara.

Tras tantos años de andadura llegan los reconocimientos y con ello las acciones para celebrarlo. La más inmediata es el lanzamiento de su nueva web, www.roselinde.net, con una imagen renovada donde las fotos muestran las piezas sobre las modelos para que con un solo "click" quien lo desee las pueda hacer suyo. Siendo pionera en el comercio electrónico en Tenerife, Jimenez cuenta que "las ferias fueron fundamentales para montar una red comercial que nos permite llegar a puntos de venta en distintas zonas de España y en toda Canarias y así ir creciendo. Luego, en la época de crisis, tuvimos que reorganizarnos y creamos una estrategia con la tienda "online". Abrimos la primera tienda de estas características de los que estamos en Tenerife. Fue una apuesta importante. El producto se fabrica aquí y sacarlo de Canarias es complicado por los márgenes, que son distintos que en textil; nosotros los asumimos, también los costes de envío".

Ahora prepara la colección otoño/invierno que llevará a Momad Metropolis, en Madrid, además de otro proyecto en Estados Unidos. "Vamos pasito a pasito", asegura Ros mientras se le ilumina la mirada. Crear diecinueve colecciones que sean bonitas pero también viables no ha sido una tarea fácil. "No todas las piezas que pasan por nuestra cabeza son comerciales, muchas de ellas se crean solo para la imagen, tal vez por el tamaño, el peso? no es posible ponerlas a la venta. Hay que tener en cuenta las tendencias, el peso, las alergias?", asegura quien es capaz de diseñar para todas las mujeres. Con la generosidad que la caracteriza ofrece un espacio que permite crear, en exclusiva, piezas para quien quiera modelar un Roselinde en alguna ocasión especial. "Design for me" tiene un proceso creativo totalmente diferente al que envuelve las propuestas que prepara para otoño/invierno o primavera/verano, aquí la inspiración llega de las prendas que vestirán o el momento para el que se fabrica.

Para culminar un año lleno de emociones, la marca está organizando un evento que se celebrará después de verano. Será una retrospectiva de la firma, con versiones de los modelos más destacados de todas las colecciones, y donde también tendrá presencia el chaleco artesanal que presentaron en la Feria Internacional de la Moda de Tenerife que ha girado por España y que, a pesar de ser el deseo de muchas personas, no se comercializa. La obra es un homenaje a estos diez años y está realizada con piezas de las diecinueve colecciones. Ha llevado más de dos meses de trabajo en los que Ros ha podido recordar la historia de su firma. "Empezó siendo mi hobby de adolescente, como tantos jóvenes. Lo dejé. Estudié. Empecé a trabajar, ? y lo retomé como una afición para mí. Luego fue a más y llegó el momento, hace diez años, en el que me planteé montar una empresa que fue el paso decisivo, fue cuando nace Roselinde como empresa". La creativa aclara que "cuando montas una empresa adquieres responsabilidades, gastos, impuestos, infraestructura, logística? al final todo tiene que traducirse en un resultado que va vinculado al precio de la bisutería. Tal vez ganas menos, pero te compensa? Reivindico a todas las que somos empresa y asumimos esos costes".

Diez años después, Ros Jimenez se alegra de la evolución y los resultados, sin perder de vista que a día de hoy el mejor regalo es que sus piezas se reconozcan y que la gente apueste por una de sus creaciones para ocasiones especiales.