Tras el silencio del último acorde, nunca aparecen en la boca del escenario para recibir aplausos. Ocultos por la tramoya, estos artistas anónimos (carpinteros, pintores, metalúrgicos, decoradores) son, en cambio, los verdaderos protagonistas de los momentos previos, de ese antes que ambienta cualquier representación escénica que el público disfruta acomodado en sus butacas.

Ellos son los inquilinos del Taller de formación y creación escénica, esa fábrica de ilusiones que tiene su residencia en una nave situada en el Polígono del Mayorazgo de Santa Cruz de Tenerife, con una superficie de 450 metros cuadrados de hormigón con techo de acero, acondicionada para acoger todo tipo de actividades.

Ayer, durante una visita a este espacio, el jefe de producción de Auditorio de Tenerife, Jorge Cabrera, responsable del equipo de trabajadores, subrayó que "es un día importante para nosotros, porque estamos acostumbrados a ruedas de prensa en las que se presenta el resultado final, pero hoy (por ayer) mostramos lo que ocurre antes y el elenco no son cantantes sino nuestros pintores, carpinteros y metalúrgicos".

Cabrera se refirió al proceso creativo de cada proyecto, que explicó dista del de una carpintería al uso porque "sabemos dónde queremos llegar con cada trozo de madera".

A su juicio, la ópera representa la máxima expresión artística, "un resultado integral en el que se conjugan música, danza, teatro, pintura, arquitectura, escultura... Y todas estas disciplinas son importantes por sí mismas en cada función", dice. De ahí que defienda que "la escenografía también baila y se mueve", por momentos incluso hasta canta.

De ese trabajo en equipo que considera una labor de artesanía, Cabrera sostiene que "las maderas de un decorado tienen sus propias ideas. Hay personas, manos, talento... y cada clavo, cada tornillo está cargado de cultura".

Detrás del telón se desarrolla todo "un mundo de investigación, creativo y profesional", que ha conseguido traspasar las fronteras insulares. Actualmente, el equipo trabaja en la escenografía de "La italiana en Argel", el primer título de la temporada 2018/2019 de Ópera de Tenerife, que se representará desde el 25 al 28 de octubre en la Sala Sinfónica del Auditorio.

El presidente del Cabildo, Carlos Alonso, destacó que "el Auditorio de Tenerife es el principal centro de producción artística", cuya actividad el año pasado implicó a más de mil empresas, el 75% canarias, y Ópera de Tenerife es "uno de los principales proyectos, que ha puesto en pie una veintena de producciones propias desde 2012".

El director insular de Cultura, José Luis Rivero, aseguró que "contamos con unos trabajadores sobrecualificados, de los mejores profesionales que hay en Canarias, y por eso podemos trabajar de tú a tú en Europa y América". En este sentido, insistió en que "en el camino hacia el desarrollo de la industria, la calidad de los técnicos es un valor fundamental".

Carlos Alonso

presidente del cabildo de tenerife

José Luis Rivero

Director insular de cultura

Jorge Cabrera

jefe produccion técnica de auditorio de tenerife