Miki Núñez, que representará a España en Eurovisión 2019 con la canción "La venda", tras ser elegido por los telespectadores en una gala de "OT" celebrada anoche, aseguró ayer que a este festival "se va a cantar y a mezclar culturas, y eso lo único que puede traer son cosas buenas".

De este modo, el cantante catalán ha dejado atrás cualquier posible polémica en torno al país que este año acogerá el evento, Israel, o sobre su elección para representar a España en el popular certamen musical, mientras no ocultó su emoción por haber ganado su pasaje a Tel Aviv y se ha comprometido a "liarla parda" para alzarse con el triunfo.

Desde que se iniciara el camino hacia Eurovisión, que se celebrará el 18 de mayo en Tel Aviv, en las redes sociales se ha alimentado una polémica sobre la celebración del festival en Israel por su política hacia los territorios palestinos.

Fue escogido para representar a España por los telespectadores de "Operación Triunfo"

Ana María Bordas, jefa de la delegación española en el Festival de Eurovisión, ha salido al paso sobre los comentarios de que ciertos concursantes hubieran declinado acudir a Israel y ha asegurado que el hecho de que la segunda clasificada de esta edición, Alba Reche, no defendiera una canción en la gala eurovisiva se debe "estrictamente a criterios musicales", y en ningún caso a que decidiera no participar.

Tras ser escogido anoche por los telespectadores de "OT", Miki no escondió la emoción que le hace ir a Eurovisión y que va a "trabajar muchísimo", ya que desde que le dieron la canción pensó que "podía liarla parda" con ella.

Frente a la posible "politización" que pueda sufrir su representación en el concurso musical "por ser catalán", Núñez ha expresado su seguridad en que "los eurofans son más inteligentes que eso".