El alcalde pedáneo de la localidad murciana de Alquerías, Francisco Zamora, ha explicado hoy que el lugar donde han sido encontrados los cadáveres de la exjugadora internacional de voleibol Ingrid Visser y de su pareja tiene un acceso "muy difícil", por lo que se ha mostrado convencido de que los autores del crimen conocen la zona.

En declaraciones a Efe, Zamora ha indicado que tuvo conocimiento del hallazgo de los cadáveres alrededor de la una de la madrugada y que éstos habrían sido localizados por la Policía tras "la declaración prestada por un hombre detenido en Valencia ayer en relación con la desaparición de la pareja".

Los cuerpos sin vida de Ingrid Visser, de 36 años, y de su novio, Lodewijk Severin, de 57, fueron hallados semienterrados en una parcela de limoneros situada junto a una vivienda de la calle Serafín de Alba, número 1, de la citada población, en una finca propiedad de Piensos Ortiz.

"El acceso a esa zona de huertos es muy difícil, hay que atravesar un canal y para transportar los cuerpos por ahí hacen falta al menos tres o cuatro personas", ha asegurado el alcalde pedáneo, quien ha reiterado que "los que los enterraron conocían la zona porque hay varios huertos y eligieron el que era más fácil de cavar".

Ha indicado que los cuerpos se encontraban dentro de un hoyo de dimensiones "considerables", donde todavía esta mañana "había restos de sangre y efectos personales de la pareja", y que, junto al hoyo, habían colocado unos bloques, "que parece que los autores del crimen habían usado para descansar mientras cavaban".

Ingrid Visser y su novio fueron vistos por última vez en la tarde del lunes 13 de mayo, a su salida del hotel Churra de Murcia, donde habían reservado una estancia de dos noches para acudir a una cita médica a la mañana del día siguiente.

Esta pareja llegó a Murcia procedente del aeropuerto de Alicante, a donde habían volado desde Amsterdam y la alerta sobre su desaparición fue dada por la familia el 15 de mayo, día en que debían volar de regreso a su país.