Las fuerzas de seguridad han hallado indicios que apuntan a que los asesinatos de una pareja holandesa pudieron haberse cometido en una vivienda de Molina de Segura y que los cuerpos fueron posteriormente trasladados a otra finca, ha informado el delegado del Gobierno en Murcia, Joaquín Bascuñana.

Los hechos se remontan al pasado lunes, 13 de mayo, en que llegan al aeropuerto de El Altet (Alicante) la ex jugadora de voleibol Ingrid Visser y su novio, Lodewijk Severein, con la intención de acudir a una clínica de inseminación artificial en Murcia capital, por lo que alquilan un Fiat Panda y se alojan en el hotel Churra, donde se les vio por última vez el martes día 14, un día antes de su previsto regreso a Holanda.

En rueda de prensa, Bascuñana ha explicado hoy que fue la directora de la clínica, a la que habían acudido en otras ocasiones Lodewijk e Ingrid, y que tenía relación con su familia, la que presentó la denuncia de su desaparición en comisaría al no acudir a la cita prevista y tras ponerse en contacto con los familiares.

En ese momento la policía abre varias líneas de investigación por la desaparición de ambos hasta que se encuentra el turismo que fue alquilado en El Altet aparcado en la avenida Juan Carlos I de Murcia, cerca del hotel Churra y de la clínica.

Posteriormente, una de las líneas de investigación, según ha comentado hoy Bascuñana, es la que lleva a una vivienda en Molina de Segura, en la que agentes de la policía científica "confirman que allí se ha cometido un acto violento", y con esas pruebas detienen a una persona en Valencia de nacionalidad española.

El delegado del Gobierno ha afirmado que están "seguros y convencidos que habrá más pruebas y personas detenidas" en las próximas horas relacionadas con este caso, en el que se está a la espera de que el Instituto Anatómico Forense confirme las identidades y las causas de la muerte.

Pese a que todavía no hay confirmación oficial de que los dos cuerpos encontrados sean los de la ex jugadora de voleibol Ingrid Visser y su novio, Lodewijk Severein, ya que habrá que esperar a la autopsia, el delegado ha asegurado que "los indicios apuntan a ello".

Con los datos que los investigadores tienen tras acudir a la vivienda de Molina de Segura y la detención de una persona, ayer tarde acudieron a una finca de la pedanía murciana de Alquerías en la que aparecieron a las 22 horas restos humanos a 50 metros de profundidad excavando en la tierra.

A mayor profundidad fueron hallados los cadáveres de un hombre y una mujer, y "con todos los indicios para suponer que son las dos personas desaparecidas", en palabras de Bascuñana.

Ingrid Visser, de 1,92 metros de altura, era muy conocida en su país porque había sido jugadora profesional de voleibol y en los últimos años integrante de varios equipos españoles, entre ellos el CAV Murcia 2000, equipo que desapareció en 2011, momento en el que dejó este deporte. Cuando formó parte del equipo murciano residió en Juan Carlos I con su pareja Lodewijk.