La española Carla Suárez se clasificó para los cuartos de final del torneo de Sydney, mientras que Albert Ramos y Marcel Granollers protagonizaron la cara y la cruz en el cuadro masculino.

La jugadora canaria se deshizo de la rusa Ekaterina Makarova por 7-6 (4) y 6-3 en una hora y media de partido. Ahora buscará una plaza en semifinales ante la alemana Angelique Kerber, quinta favorita, que derrotó a la estonia Kaia Kanepi por 6-3 y 6-4.

Ramos, que entró en el cuadro principal gracias a la renuncia del canadiense Vasek Pospisil por problemas de espalda, se impuso al estadounidense Sam Querrey en un duro partido, por 4-6, 6-3 y 6-4, y en segunda ronda se medirá al checo Radek Stepanek vencedor del australiano Samuel Groth, cuartofinalista el año pasado, por 6-7 (6), 7-6(5) y 6-2.

Granolles no tuvo opción ante el también australiano Bernard Tomic, defensor del título, ante el que perdió por un contundente 6-3 y 6-0, en un partido en el que no pudo aprovechar nada más que una de las ocho bolas de ruptura que tuvo.

El francés Nicolas Mahut será el rival del argentino Juan Martín del Potro, primer preclasificado, al derrotar al estadounidense Ryan Harrison por 7-6 (2) y 7-5 con doce saques directos.

El croata Marin Cilic, séptimo cabeza de serie, debutó con una difícil victoria ante el alemán Jan-Lennard Struff, por 3-6, 6-3 y 6-3, y se verá las caras con el uzbeko Denis Istomin, verdugo del español Pablo Andújar.

La gran sorpresa de la jornada la dio, en el cuadro femenino, la estadounidense Bethanie Mattek-Sands al vencer a la primera favorita y defensora del título, la polaca Agnieszka Radwanska, por 7-5 y 6-2 en un partido en el que iba perdiendo por 3-5.

En cuartos de final se medirá a su compatriota Madison Keys, que superó a la croata Ajla Tomljanovic por 6-0, 3-6 y 7-6 (3).

La segunda favorita, la checa Petra Kvitova, no tuvo piedad de otra estadounidense, Christina McHale, a la que vapuleó por 6-1 y 6-0, y su compatriota Lucie Safarova se deshizo de la danesa Caroline Wozniacki, sexta favorita y exnúmero uno del mundo, por 6-4 y 7-6 (7).