El Barcelona derrotó al Vezsprém húngaro (26-25) en la final de consolación de la "Final Four" de la Liga de Campeones de balonmano, en un partido muy igualado, no exento de polémica, y en el que el conjunto catalán acusó el mazazo que supuso caer en semifinales ante el Flensburg.

Al Barça le costó un mundo meterse en el duelo. Sin intensidad defensiva y muchas dudas en el ataque posicional, los jugadores azulgranas demostraron no tener la cabeza en el partido. Sólo el orgullo de Rutenka y las paradas de Sterbik (37 por ciento acierto al descanso) evitaron que el desastre fuese mayor en el primer tiempo.

Los primeros seis goles del equipo dirigido por Xavier Pascual "Pasqui" los marcó el lateral internacional bielorruso, cuatro desde el punto de penalti. Sus compañeros se estrellaban una y otra vez contra un entonado Fazekas (50 por ciento paradas al descanso).

Hasta que en el minuto 23, el macedonio Kiril Lazarov, en una acción de contraataque, logró superar al meta húngaro para poner por primera vez a su equipo por delante en el marcador (7-6, min.23).

El Vezsprém, otro equipo construido para luchar por el título continental, tampoco estaba mostrando su mejor versión (9-10, descanso), aunque imprimirle un punto más intensidad a su defensa le permitió en el arranque del segundo acto abrir una pequeña brecha en el electrónico (9-13, min.34).

El técnico catalán, Xavier Pascual "Pasqui", pidió tiempo muerto. Y su equipo despertó bajo la dirección de Dani Sarmiento. El central, con cinco goles casi seguidos, compartió la responsabilidad en ataque con Rutenka.

Con un parcial de 4-0, el Barça volvía a igualar el choque (13-13, min.37). El "Spanish" Vezprém empezaba a acusar el cansancio aunque, gracias a su trabajo defensivo, evitó que su rival se escapara, hasta que una exclusión de Nagy le hizo mucho daño. El Barçelona cogió una pequeña ventaja (22-20, min.53) después de un nuevo parcial 3-0 en cinco minutos.

El técnico español del Vezsprém, Antonio Carlos Ortega, paró el partido para oxigenar a sus jugadores. Chema Rodríguez desatascó a los suyos en ataque con tres goles seguidos y su equipo logró entrar en el último minuto con una mínima desventaja (25-24).

Nadie en el Barça quiso asumir la responsabilidad de lanzar. Los árbitros amenazaron con pitar pasivo. Pasqui pidió tiempo muerto. Faltaban 29 segundos. El miedo a fallar continuó en los jugadores azulgranas, pero la permisividad arbitral permitió finalmente al internacional francés Nikola Karabatic conseguir el gol que aseguraba el tercer puesto.

Ficha técnica:

26 FC Barcelona: Sterbik, Víctor Tomás, Gurbindo, Sorhaindo, Raúl Entrerríos, Rutenka (11,7p) y Juanín García (2) -equipo titular- Viran Morros, Lazarov (3), Karabatic (4), Dani Sarmiento (6) y Saubich.

25 MKB-MVM Vezsprém: Fazekas, Ugalde (1), Terzic, Schuch, Nagy (5), Vilovski (2) y Carlos Ruesga (1) -equipo titular- Alilovic (ps), Tamas Ivancsik, Ilic (7,4p), Chema Rodríguez (4), Gulyas (2), Jamali (2), Gergo Ivancsik (1).

Marcador cada cinco minutos: 0-2, 2-3, 3-3, 6-6, 7-8, 9-10 (descanso); 10-13, 14-14, 18-17, 20-20, 22-21 y 26-25.

Árbitros: Andrei Gousko y Siarhei Repkin (Bielorrusía). Excluyeron a Schuch, Nagy (2) por parte del Vezsprém.

Incidencias: Partido por el tercer y cuarto puesto de la "Final Four" de la Liga de Campeones disputado en el Lanxess Arena de Colonia ante unos 20.000 espectadores.