Vitolo y Ayoze Díaz configuran la pareja de retornados al Tenerife. Ambos pasan por ser unos novatos un tanto diferentes en La Palma. Los dos han vuelto al Tenerife, el club de sus orígenes. Ayoze lo hizo en el pasado mercado de invierno y Vitolo este mismo verano, por lo que completarán su "primera" concentración desde el inicio de la campaña.

Entre los dos acumulan cinco pretemporadas en Barlovento y, de nuevo, regresan con la misma ilusión de la primera vez. Lo hacen, además, viendo el paso del tiempo, más de una década después, y reconociendo que el fútbol ha sido bueno con ellos, sintiéndose afortunados y privilegiados por tener de nuevo la oportunidad de jugar en casa.

Para el lateral está siendo su tercera presencia en estas mismas instalaciones. Ya estuvo anteriormente bajo el mandato de Rafa Benítez primero y Ewald Lienen después. Ahora repite experiencia con Álvaro Cervera como máximo responsable técnico. Como él mismo recuerda, "esta es la tercera vez que estoy en Barlovento. Es un lugar ideal, la temperatura acompaña para poder entrenar, no hace calor y se agradece. Con el Racing de Santander y el Mallorca estuve en stages en Holanda, en Austria, en la Península... Cada sitio tiene su encanto y al final se trata de trabajar y prepararte para estar en forma".

Por su parte, Vitolo afronta su cuarta presencia en Barlovento. Al igual que Ayoze, estuvo bajo las órdenes de Ewald Lienen, pero también con el Tenerife de Pepe Mel y David Amaral. "Es mi cuarta pretemporada aquí, pero es como si hubiera estado el año pasado, por la comodidad y trato de la gente, aunque ya no vengo como un canterano. Estoy viviéndolo como la primera vez". El de Valleseco reconoce que está muy feliz de poder revivir aquellos tiempos, y se muestra sorprendido por el paso de los años cuando observa una foto de hace más de diez años junto a otros jóvenes canteranos. Algunos se labraron un hueco en el difícil mundo del fútbol y varios de ellos siguen compitiendo en el balompié regional, pero de otros no se ha sabido más. Vitolo los reconoce y sitúa a todos. Aarón continúa jugando en el Marino; Jonathan Torres, que fue un gran goleador en el Tenerife y en Lanzarote; Julio Hormiga, que tenía muchísima calidad pero que tuvo una lesión que le impidió continuar... Luego están Diego y Miguel Ángel, que jugaron algo menos, pero siguieron por equipos de Tercera. Con Kiko Ratón coincidió en Grecia, estando el delantero en el Iraklis, donde era muy querido. Y Kirian, que también jugó en Europa, y ahora está en el Laguna; o Roberto Carlos, quien jugó mucho y ahora está en el Granadilla, igual que Airam, en el Marino, Cristo Marrero -"quién no lo conoce", exclama el de Valleseco-, y Willy, que llegó a jugar en la Cultural Leonesa.

Sobre la misma jardinera que hace 11 años, Ayoze posa con su habitual sonrisa, consciente de que esta será una temporada muy importante para él: "Esta vez empiezo desde cero, haciendo pretemporada incluso. Llegué en enero y no fue fácil, porque los compañeros ya tenían ritmo de competición, y yo llegué sin ritmo porque estaba sin equipo. Hacer la pretemporada y empezar de cero con todos te da un plus". Por su parte solo queda "trabajar para ayudar al equipo en lo que pueda. Al final estoy aquí para, semana tras semana, entrenar y que el entrenador decida. Cada profesional busca jugar el máximo de minutos posible y en mi caso es igual. Lo que pasa es que las decisiones las toma el entrenador".

Para Vitolo supone revivir el inicio de todo. Mientras continúa mirando las fotografías nos cuenta que está atravesando un momento muy ilusionante. "Me tomo esta pretemporada con la ilusión de un canterano, con ganas de hacerlo bien y de que la gente se sienta orgullosa".

Jugador de equipo, veterano y voz autorizada en el vestuario tinerfeño, Ayoze afirma, satisfecho, que " la pretemporada marcha bien. Lo importante es que estamos trabajando y que, de momento, no hay compañeros lesionados. Todos estamos a buen nivel y, al final, es lo que importa". Experto en pretemporadas, reconoce que "hay entrenamientos más divertidos y otros un poco más aburridos porque tocas poco el balón. Si nos das el balón, nos engañas un poco y se hace menos pesado", aunque se resigna a que "es parte de la pretemporada y hay que hacerla".