El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, podrá contar a partir de mañana con todos sus jugadores menos el uruguayo Luis Suárez.

El martes se incorporarán a los entrenamientos los cuatro internacionales que han estado apurando sus vacaciones tras el Mundial: los argentinos Lionel Messi y Javier Mascherano y los brasileños Neymar da Silva y Dani Alves.

A la espera de que el TAS reduzca la sanción de cuatro meses a Suárez y de que el club concrete uno o dos fichajes más (el de otro central y el de un lateral derecho), Luis Enrique tendrá a su disposición al resto de efectivos para afrontar la segunda mitad de la pretemporada.

Los cuatro últimos mundialistas en llegar no estarán presentes mañana en la sesión matinal, pero sí en la vespertina, la última antes de viajar a Ginebra para medirse el miércoles al Nápoles en el tercer amistoso estival del equipo español.

No es probable, no obstante, que ninguno de ellos viaje a tierras suizas con la expedición azulgrana, que después del amistoso volverá al trabajo el jueves por la tarde en la Ciudad Deportiva Joan Gamper.

Además, Neymar aún se recupera de la fractura de vértebra que se produjo durante el Mundial y que no le dejará jugar probablemente hasta el Trofeo Gamper, el día 18, frente al León mexicano, y Alves tiene una conversación pendiente con el entrenador y el secretario técnico, pues el club no cuenta con él para el nuevo proyecto.

Con la llegada de Messi, Neymar, Mascherano y Alves, serán ya 24 los miembros de la primera plantilla (26 si se concretan los dos fichajes).

Luis Enrique ya ha avanzado que quiere un plantel corto para mantener la motivación y la intensidad durante toda la temporada de todos sus hombres y poder dar oportunidades a futbolistas del filial si lo considera necesario.

Por tanto, el Barça sigue trabajando en dar salida a Ibrahim Afellay, Alex Song y también a Alves, los tres jugadores con los que a priori no cuenta el técnico.