El defensa Alberto Moreno, fichado por el Liverpool inglés por unos dieciocho millones de euros, es otro de una larga lista de futbolistas formados en la cantera del Sevilla que deja mucho dinero en el club con su traspaso, lo que corrobora la rentabilidad de potenciar la formación de jugadores.

En la historia más reciente han sido muchos los canteranos que se han marchado a otros equipos con buena cotización y así son recordados casos como el del delantero José Antonio Reyes -ahora otra vez en el equipo-, quien a mediados la campaña 2003-04 se fue al Arsenal inglés y dejó en el club presidido entonces por José María Del Nido y entrenado por Joaquín Caparrós unos veinte millones de euros.

El defensa Sergio Ramos, que se fue al Real Madrid (27 millones en la campaña 2005-06), o el extremo Jesús Navas, al Manchester City inglés (20 millones en la 2013-14), han sido otros futbolistas formados en la ciudad deportiva sevillista que se han marchado del club dejando grandes beneficios.

Ahora ha sido Alberto Moreno, sevillano que este julio cumplió 22 años, el que también lleva una carrera meteórica que empezó al debutar con el primer equipo en abril de 2012 en un partido de la Liga BBVA ante el Athletic Club.

De ahí, el lateral izquierdo ha progresado muy rápidamente y ya estuvo muy cerca de entrar en la lista del seleccionador nacional, Vicente del Bosque, para el pasado Mundial de Brasil, para ahora dar otro paso para firmar por uno de los grandes del fútbol inglés.

El defensa fue llamado por Del Bosque por primera vez el pasado octubre, para los dos últimos partidos de clasificación para el Mundial, ante Bielorrusia y Georgia, y también jugó el último de España ante de irse a Brasil, en el Sánchez Pizjuán frente a Bolivia, con lo que ya acumula tres citas con la Absoluta.

Alberto Moreno inició está temporada con ficha de profesional pero del Sevilla Atlético -filial de Segunda B-, aunque el mismo día que Del Bosque lo convocó por primera vez, el 4 de octubre de 2013, el club anunció la ampliación y mejora de su contrato, que expiraba en junio de 2015.

El sevillano, así, firmó uno nuevo que prolongaba su vinculación hasta el 30 de junio de 2018 con una cláusula de rescisión unilateral de 30 millones de euros.

Alberto Moreno, después de debutar con el Sevilla a finales de la campaña 2011-12, se abrió un sitio en el primer equipo en la siguiente (2012-13), cuando ya lo dirigía Unai Emery, y acabó el ejercicio con quince partidos de Liga disputados y otros dos de la Copa del Rey.

En la pasada temporada ya se hizo indiscutible en el lateral zurdo, del que desplazó al que era su dueño, el catalán Fernando Navarro.

Alberto Moreno es de los jugadores al que el técnico guipuzcoano menos incluyó en las rotaciones y se marcha, además, como vigente campeón de la Liga Europa, final que ganó en Turín en la tanda de penaltis al Benfica de Lisboa y en la que fue titular, pero también con la decepción de la derrota de anoche en Cardiff ante el Real Madrid (2-0) en la Supercopa de Europa, partido para el que a última hora no fue ni inscrito en la convocatoria al estar cerrado el acuerdo para irse al Liverpool.

Después de que su marcha pareciera un hecho a la conclusión del este pasado ejercicio debido al interés del club inglés, el defensa andaluz se encargó de enfriar el asunto en junio cuando afirmó que solo pensaba en iniciar la pretemporada con el Sevilla, lo que así sucedió cuando la plantilla volvió al trabajo a mediados de julio.

Moreno ha participado de la pretemporada como uno más en las dos concentraciones desarrolladas y ha jugado de forma asidua en los amistosos, pero con la entrada de agosto el asunto de su traspaso volvió a tomar fuerza y se ha hecho una realidad.

Ahora tiene el Sevilla aproximadamente medio mes para invertir el dinero ingresado y potenciar un equipo del que se espera mucho para esta campaña pero en el que ya no están jugadores que fueron básicos en la anterior como el propio Alberto Moreno, el croata Iván Rakitic o el camerunés Stéphane M''Bia.