El Barcelona y el Real Madrid han reforzado si cabe aún más sus plantillas para asaltar en la Liga 2014/15 al trono que ocupa el Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone y arrebatar la corona que ganó de forma brillante la pasada campaña.

Los dos grandes ''acorazados'' del fútbol español han vuelto a echar el resto en busca de potenciar todavía más sus escuadras para luchar por todos los títulos en disputa, entre los que destaca el de la regularidad, el que defiende el conjunto rojiblanco, que también presenta sus novedades importantes entre salidas y llegadas.

El Barcelona, sin ir más lejos, tiene una de sus grandes novedades en el banquillo. Un exjugador de la casa, Luis Enrique Martínez, es el encargado de conducir la nave tras la discreta pasada campaña bajo el mando de Gerardo ''Tata'' Martino, ya confirmado como nuevo seleccionador argentino.

Tras su paso por el Roma y el Celta, el exinternacional asturiano dirigirá los pasos de un equipo que busca reencontrarse con su identidad y con los títulos.

Luis Enrique ha conseguido que finalmente Xavi Hernández, el gran ''arquitecto'' del fútbol barcelonista y de la selección -ha anunciado su retirada de esta-, continúe en el equipo. Puede ser casi o más importante que los fichajes.

En este capítulo sobresale la llegada del uruguayo Luis Suárez, si bien, por la sanción de la FIFA tras su mordisco al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial, este no podrá jugar hasta el 26 de octubre, y la del croata Ivan Rakitic, un valor seguro por lo visto en el Sevilla y en la pretemporada.

El Barcelona, al fin, ha potenciado el puesto de central con el francés Jeremy Mathieu, procedente del Valencia, y del belga Thomas Vermaelen, del Arsenal. No obstante, será difícil hacer olvidar al retirado Carles Puyol.

Para la portería también ha habido relevo absoluto con la incorporación del chileno Claudio Bravo y del alemán Marc-Andre Ter Stegen, que se jugarán el puesto que deja vacante otro inolvidable jugador como Víctor Valdés.

Estas incorporaciones reforzarán un bloque que estará de nuevo liderado por Leo Messi y Andrés Iniesta y en el que se espera que el brasileño Neymar, cumplido el año de su adaptación, despunte realmente.

En la ''acera de enfrente'', el Real Madrid del italiano Carlo Ancelotti, ganador la pasada campaña de la Liga de Campeones (ante Atlético en la final) y de la Copa del Rey (frente al barcelona), aspira a recuperar el trono en la Liga.

Lo hará con la mayor parte del bloque del curso precedente con la irrupción estelar del alemán Toni Kroos, llamado a ser uno de los cerebros tras ser campeón del mundo con su selección, del colombiano James Rodríguez, una de las grandes revelaciones de Brasil 2014, y del costarricense Keylor Navas, también considerado uno de los mejores guardametas de la cita universal.

La llegada de este ha significado finalmente la salida de Diego López al Milán, tras ser el meta gallego el titular el pasado año en la Liga. Tras más de un año muy complicado para Iker Casillas, la competencia, muy dura, se llama ahora Keylor Navas.

Cristiano Ronaldo volverá a ser el líder del proyecto blanco en ataque junto al francés Karim Benzema, renovado y reforzado como delantero, y al galés Gareth Bale, cuya pretemporada ha sido tan esperanzadora como su aportación en los títulos de la pasada temporada.

No obstante, por la composición de la plantilla parece que falta un delantero tras la salida del canterano Álvaro Morata, e incluso quedan días para que haya más movimientos en cuanto a salidas tras un verano en el que se ha hablado mucho en este sentido del argentino Ángel di María y del alemán Sami Khedira.

El Atlético defenderá el trono con argumentos. El primero desde el banquillo, el inconmensurable trabajo del ''Cholo'' Simeone para formar un grupo poderoso.

Además, lejos de producirse lo que muchos aficionados pensaban, la diáspora de todas sus grandes figuras tras la magnífica temporada pasada, la salida de hombres como Diego Costa, Filipe Luis, Thibaut Courtois, David Villa, Adrián López y Diego Ribas, parece que ha sido bien cubierta.

Simeone ha conseguido mantener la base del dispositivo defensivo, y el club ha logrado la contratación del delantero croata Mario Mandzukic, el veloz francés Antoine Griezmann y el mexicano Raúl Jiménez, y los laterales Guilherme Siqueira y Cristian Ansaldi, así como los porteros Miguel Ángel Moyá y Jan Oblak.

Ahora al técnico argentino le queda adaptar a los nuevos a un esquema que el resto de la plantilla se sabe de memoria y que tan buenos y exitosos resultados ha reportado. La defensa del título, por lo tanto, parece menos utopía que en su día se presentaba alcanzar la corona.

Tras este ''peldaño'' se presenta un bloque de equipos llamados a pugnar por la ''otra plaza'' de la Liga de Campeones, a la aspiran que el nuevo Valencia de Peter Lim, el Sevilla, el Athletic, Villarreal e incluso Real Sociedad.

La afición valencianista espera que el proyecto del multimillonario singapurés signifique una vuelta a las alturas, con el luso Nuno al mando de las operaciones y muchas caras nuevas para un conjunto que ha alimentado las esperanzas este verano.

El Sevilla de Unai Emery, pese a perder a su jugador estandarte como Rakitic e incluso a su joven más destacado como Alberto Moreno, se ha reforzado con jóvenes muy esperanzadores como Gerard Deulofeu, cedido por el Barcelona, Denis Suárez, y otros en progresión como Aleix Vidal o Iago Aspas, y también ha apuntado buenas cosas, incluso en la derrota de la Supercopa europea ante el Real Madrid.

La Real Sociedad, sin Griezmann ni Claudio Bravo, también tiene que reinventarse en cierta forma, para mantenerse en el grupo de elite de la Liga, y el Athletic, que ha ''sufrido'' la salida de Ander Herrera al Manchester United, dispone de todo el resto del bloque para aspirar a repetir la magnífica pasada campaña, en la que firmó con Ernesto Valverde la cuarta plaza y el acceso a la previa de la Liga de Campeones.

Mientras, el Villarreal de Marcelino García Toral, tras sorprender el curso precedente en su retorno a la máxima categoría, confía en confirmar su crecimiento con una plantilla si cabe más poderosa.

El Rayo Vallecano de Paco Jémez se ha convertido en un conjunto muy atractivo y, por nombres, parece que dispone del equipo más importante de los últimos tiempos. La ilusión en la hinchada franjirroja es tremenda.

El Getafe, tras salvarse con ciertos apuros bajo la dirección del rumano Cosmin Contra, encadenará su undécima campaña seguida en la máxima categoría sabedor que el objetivo es ese, la permanencia, como el de otros muchos.

Sergio González se ha hecho con las riendas del Espanyol, que busca la tranquilidad sin renunciar a cotas mayores; lo mismo que tratará un clásico ya de los banquillos como Joaquín Caparrós, ahora al frente del Granada; mientras que el Málaga ha reclutado a Javi Gracia, el Levante a José Luis Mendilíbar y el Celta al argentino Eduardo Berizzo en un intento de afianzamiento y, si se puede, luchar por Europa.

La Liga será histórica para el modesto Eibar, que se estrenará en la división de oro del fútbol español tras lograr con brillantez el ascenso. El Deportivo regresa, con Víctor Fernández como entrenador, a la máxima categoría tras una campaña y el Córdoba lo hace 42 años después con el técnico Albert ''Chapi'' Ferrer tras un ascenso increíble firmado en la prolongación de la vuelta de la última eliminatoria con un tanto del mexicano Uli Dávila.