La grancanaria Carla Suárez Navarro dijo, tras debutar con triunfo en el Abierto de Estados Unidos de tenis, que ya ha visto el cuadro que podría llevarle a un posible cruce en cuartos con Serena Williams, pero prefiere seguir "partido a partido".

"La primera vez que vi el cuadro pensé que era uno de los más difíciles (...), pero hay que ir partido a partido, y ahora me viene un huesito", dijo la tenista española sobre su rival en segunda ronda, la estadounidense Coco Vandeweghe.

Suárez-Navarro se impuso hoy en su partido inaugural en Nueva York a la australiana Ajla Tomljanovic por 3-6, 6-1 y 6-3, después de sufrir más de lo esperado en el primer set, en el que, según admitió, empezó "demasiado relajada".

La decimoquinta cabeza de serie del último torneo de Grand Slam de la temporada disputa por séptima vez el Abierto e intentará defender los cuartos de final que consiguió el año pasado, su mejor clasificación en el torneo.

Sobre su próxima rival, Vandeweghe, que venció ayer a la croata Donna Vekic por 2-6, 6-3 y 6-1, la española aseguró que tiene que estar "alerta" porque es una jugadora "peligrosa" a la que tendrá que "restarle bien y aguantarle" los puntos.

"Yo soy una jugadora que se fija en lo suyo e intento que no me afecte que los demás ganen o pierdan", añadió la mejor tenista española clasificada del torneo, quien espera seguir estando "al cien por cien" en el resto de competición.