La Unión Deportiva Las Palmas jugará el próximo domingo en el campo de su eterno rival, el Club Deportivo Tenerife, con el doble objetivo de consolidar su liderato de la Liga Adelante y poner fin a su mala racha de resultados en el estadio Rodríguez López, donde no gana desde 2001.

Fue en diciembre de ese año cuando los amarillos celebraron su último éxito liguero en el Heliodoro. Coincide, además, que ha sido la única vez que ambos representativos canarios han cruzado sus caminos como equipos de Primera.

La Unión Deportiva ganó por 1-3 con goles de Tevenet, Josico y del guardameta argentino Nacho González, de penalti, mientras que su compatriota Lussenhoff hizo el tanto local. El defensa Ángel López, en su primera etapa de amarillo, es el único jugador de la actual plantilla grancanaria que lo vivió en el césped.

Pero el recuerdo más cercano es el del contundente 3-0 encajado por Las Palmas en diciembre del año pasado. Ha sido, hasta la fecha, la mayor diferencia obtenida por cualquiera de los dos equipos en los choques ligueros disputados en ambas islas.

No todos son malos recuerdos para la Unión Deportiva en el campo del eterno rival. Allí ganó por 1-2 el primer derbi de la historia, un 30 de abril de 1950, en la primera jornada de la liguilla de ascenso a Segunda, categoría que alcanzó dos meses más tarde.

Los amarillos también celebraron en el Heliodoro su segundo ascenso a Primera, un 25 de abril de 1954, en un partido que acabó sin goles.

Precisamente son los empates -siete- los resultados más repetidos en el feudo santacrucero. El 0-0 y el 1-1 se han dado tres veces cada uno. El balance se completa con seis victorias del Tenerife y cuatro de Las Palmas.

"Voy a preparar el partido para darle una alegría a la afición", dijo el pasado sábado Paco Herrera, entrenador de los amarillos, al término del partido ante el Alcorcón (4-1), sabedor de las especiales connotaciones del enfrentamiento, pese a que el catalán lleve solo dos meses y medio en la isla.

Durante el choque ante los madrileños, y con el marcador resuelto, parte de los seguidores locales corearon: "En Tenerife tenemos que ganar", un claro mensaje a sus futbolistas para poner la guinda al excelente comienzo de temporada y borrar la afrenta sufrida el año pasado.

Hasta el argentino Sergio Araujo, máximo goleador de la categoría, ya piensa en el esperado encuentro: "Cambio mis siete goles por marcar uno el domingo", dijo el delantero sudamericano nada más acabar el partido del sábado. Y es que el derbi comenzó a jugarse ese mismo día desde la otra orilla.