El camerunés Stéphane Mbia volvió a ser una vez más el salvador del Sevilla al lograr en la prolongación el tanto del empate a dos, en un partido en el que el Rijeka croata ya se veía vencedor tras darle la vuelta al marcador ante un rival que jugó la segunda parte en inferioridad numérica.

El conjunto español cerró la primera mitad con un 0-1 y con la sensación de que estaba todo controlado, pero en la segunda llegaron las complicaciones con el empate de penalti y la expulsión del central francés Timotheé Kolodziejczak, aunque el punto sumado en Rijeka le vale para unirlo a los tres de la primera jornada ante el Feyenoord holandés (2-0) y liderar el grupo.

Después de la dolorosa derrota del pasado sábado en el Vicente Calderón (4-0) ante el Atlético de Madrid, este partido, pese a ser de otra competición, era una magnífica oportunidad de recobrar las buenas sensaciones con las que se ha iniciado la temporada, objetivo que no se pudo cumplir con ese empate a dos y el sufrimiento pasado.

Además, el partido era otra vez como visitante y ante un rival que, sin mucho nombre europeo, sí que tiene unas muy buenas estadísticas como local en un estadio donde sus aficionados aprietan mucho y más en este partido que había despertado espectación al llegar el vigente campeón de este torneo continental.

El entrenador sevillista, Unai Emery, fiel a lo que ha hecho durante todo lo que va de campaña, volvió a efectuar muchos cambios en el carrusel de partidos que alterna entre la competición doméstica y la europea.

En esta ocasión, se quedaron en la grada del estadio Kantrida sin inscribirse jugadores de peso como el central argentino Nico Pareja o el extremo canario Víctor Machín ''Vitolo''.

El que tuvo su primera oportunidad como titular en lo que va de curso fue el delantero Iago Aspas, contratado esta campaña procedente del Liverpool inglés, quien dejó en el banquillo al colombiano Carlos Bacca.

Aspas aprovechó bien la confianza de Emery porque un buen movimiento suyo dentro del área con remate fuerte y ajustado sirvió para que el Sevilla pusiera 0-1 con el que concluyó la primera parte, que fue además el primer tanto del punta gallego en partido oficial con la formación andaluza.

Antes del gol, que llegó en el minuto 26, el conjunto visitante había controlado siempre la situación sin que el Rijeka, pese al aliento de los suyos, le pusiera en peligro.

Tras el 0-1, el conjunto que entrena el esloveno Matjaz Kek redobló los esfuerzos por equilibrar el partido y se unió a que el Sevilla dejó de mover tanto el balón, pero aún así la formación croata no hizo trabajar demasiado al meta portugués Antonio Alberto Bastos ''Beto''.

Otra historia diametralmente distinta fue la segunda parte, pues a los seis minutos de la reanudación una desconcentración defensiva del Sevilla propició que Kolodziejczak le hiciera penalti a una de las figueras del equipo croata, el delantero Andrej Kramaric, y que además la falta supusiera la expulsión del sevillista.

Kramaric transformó el penalti en el empate a uno y, pese a que Emery hizo pronto dos cambios, con la entrada del centrocampista Mbia y el lateral francés Benoit Tremoulinas, para dar más consistencia al equipo, el Rijeka apretó fuerte en busca darle la vuelta al marcador y lo consiguió.

Kramaric estuvo muy cerca de poner el 2-1, pero el que sí lo consiguió en el minuto 67 fue el centrocampista Zoran Kvrzic en otra descoordinación defensiva de los visitantes.

El Sevilla, con un jugador menos y ya con el resultado en contra, lo tuvo complicado aunque Emery metió a Bacca por Iago Aspas para confiar en que pudiera enseñar sus cualidades de goleador, pero el salvador no fue el colombiano sino Mbia, quien en el primer minuto de la prolongación enganchó en el área un balón tras centro de Tremoulinas y puso el definitivo 2-2.

Ficha técnica:

2 - Rijeka: Vargic; Tomecak, Mitrovic, Leskovic, Leovac; Jugovic, Jajalo, Cvijanovic, Kvrzic (Zlomislic, m.75); Moisés (Vesovic, m.88) y Kramaric (Krstanovic, m.82).

2 - Sevilla: Beto; Coke, Carriço, Kolodziejczak, Fernando Navarro; Krychowiak, Iborra; Aleix Vidal, Éver Banega (Mbia, m.58), Reyes (Tremoulinas, m.58); y Iago Aspas (Bacca, m.72).

Goles: 0-1, M.26: Iago Aspas. 1-1, M.53: Kramaric, de penalti. 2-1, M.67: Kvrzic. 2-2, M.91: Mbia.

Árbitro: Kenn Hansen (Dinamarca). Expulsó con roja directa al sevillista Kolodziejczak (m.51) por hacer un penalti en una clara ocasión de gol. Además, amonestó a los locales Cvijanovic (m.13) y Kvrzic (m.18) y al visitante Fernando Navarro (m.87).

Incidencias: Partido de la segunda jornada en el Grupo G de la Liga Europa, disputado en el estadio Kantrida de la localidad croata de Rijeka, al que asistieron unos trece mil espectadores que llenaron las gradas.