Los síntomas de recuperación que mostró el CD Tenerife en El Sadar animan a los jugadores, pero estos indicios no son un consuelo. Al menos, así lo ve uno de los titulares en el campo del Atlético Osasuna, Hugo Álvarez, para quien ahora solo sirve sumar.

"Las dinámicas las marcan los resultados", recordó el defensa. "El equipo dio la cara y tuvo una actitud tremenda, pero volvió de vacío a casa y ahora lo que importa son los puntos y no la imagen", añadió Álvarez, quien, no obstante, detectó un halo de esperanza en sus compañeros. "Fuera de casa no veníamos dando una imagen tan buena y la gente se sintió más contenta porque vimos en El Sadar un atisbo de luz para pensar que vamos a salir de esta situación"

El central vigués reconoció que fue "un palo" perder después de haber seguido el camino correcto en Pamplona. "Cuando planteas el partido tan bien y el equipo responde así, generando fútbol ofensivo y marcando dos goles, perder es un palo", opinó antes de profundizar en el análisis de los motivos de ese giro que dio el encuentro en la recta final. "Pienso que el partido estaba bien planteado y estaba para hacerle daño al rival a la contra, con Suso abierto en la banda derecha y tres centrocampistas que trabajaron muy bien, y se nos fue en los minutos 45 y 93. Desde fuera es algo difícil de manejar. Los que estábamos dentro somos los que debimos hacerlo".

Con esta reflexión, dio a entender que Álvaro Cervera no influyó tanto como los jugadores en la derrota. "No digo que la culpa sea de uno ni de otro, porque somos un bloque. La cabeza visible es la del entrenador, pero, al fin y al cabo, aquí todos somos uno".

En cuanto a lo que espera de la afición en el compromiso del domingo ante el Barcelona B, compartió su deseo de que "el público esté con el equipo desde el principio" y que, en el caso de considerarlo oportuno, exprese su desencanto en otro momento. "Luego tendrán tiempo, si la cosa no va bien, de chiflar o lo que crean mejor".