Como cada 13 de diciembre, desde hace diez años, el corazón se encoge al recordar al dirigente y al hombre. Sus amigos lo recordamos también el resto del año. Pero en esta fecha, la de pasado mañana, la sombra que proyecta su obra se hace más alargada. Javier Pérez fue un presidente excepcional. Con su pérdida nació la leyenda del hombre que soñó en nombre de todos y convirtió en realidad su anhelo de hacer grande al Tenerife.

La memoria del mejor presidente de la historia del club ha permanecido viva, pero no ha tenido todavía un reconocimiento oficial. Ahora, un colectivo tinerfeñista, Tenerifemanía, ha dado el paso. El décimo aniversario de la desaparición de tamaño personaje y la puesta en marcha de esta causa, son razones suficiente para, a diferencia de los años anteriores, acercarnos a la familia de Javier, a su viuda, Josefina Castañeda, que sigue sintiendo al Tenerife desde la grada del estadio.

Por fin se pone en marcha el reconocimiento oficial a Javier, que parte, además, de un colectivo de aficionados.

Sí, pero además del movimiento de Tenerifemanía me llamó Javier Armas y me dijo que el Tenerife estaba también al frente de esta iniciativa y que igualmente el club quiere hacer un homenaje y que buscará un momento para hacerlo.

¿Están viviendo de forma especial el décimo aniversario?

La verdad es que estas semanas de diciembre son importantes para nosotros. En esta ocasión se cumplen diez años del fallecimiento de Javier. Nosotros lo recordamos todo el año, pero cada 13 de diciembre nos acordamos especialmente de todo lo sucedido.

¿Cómo acoge la idea la familia?

En este décimo aniversario ha surgido este movimiento de Tenerifemanía en cuanto a la posibilidad de un reconocimiento a la figura pública de Javier y también han intervenido el CD Tenerife y el Ayuntamiento de Santa Cruz, a través de un comentario que ha hecho público su alcalde. La familia agradece mucho todos estos movimientos.

¿Le sorprende esta idea diez años después de su fallecimiento?

Para mí fue un poco una sorpresa. Me parecía recordar que en el año 2005 hubo unas palabras del alcalde de Santa Cruz, que entonces era Miguel Zerolo, en el sentido de que se había iniciado el protocolo para el reconocimiento de honores a Javier, pero bueno, es ahora cuando se está llevando la idea a efectos prácticos.

Hay otro reconocimiento, el realce que ha tenido la obra de Javier con el paso del tiempo...

Efectivamente, la perspectiva del tiempo hace ver la magnitud de los acontecimientos que se vivieron en el Tenerife en aquellos años. Creo que podemos volver a conseguir gestas como aquellas. Siempre digo que todo lo que se logró se puede volver a conseguir. Es muy importante que el equipo de personas que se reúna en el club, trabaje por una idea común. Javier acertó en esta faceta, porque se supo rodear de las personas adecuadas, al margen de que aquello fue un movimiento en el que apoyaron también los aficionados y los medios de comunicación, porque entendieron que esos logros eran para toda una Isla.

Quedan señales de su gestión, en especial el patrimonio. Hace poco el club vendió su sede...

Sí, se consiguió un patrimonio importante para el club. Tengo conocimiento de que el club ha dejado la sede del Callejón del Combate y se ha radicado en el Estadio. Supongo que son movimientos que se hacen para lograr lo mejor para la entidad en la situación que se vive actualmente.

¿En qué le gustaría que consistiera el homenaje? ¿Ponerle su nombre a una calle, a una instalación...?

Cualquier decisión que se tome será bien recibida por la familia, que estará muy agradecida. Efectivamente, una calle o un nombre de una instalación, como dice, lo agradeceríamos mucho. Y no solo que al final se tenga un reconocimiento de ese tipo. Basta con el movimiento que ha surgido y con comprobar el deseo que hay por parte de la afición. Para nosotros ya es mucho, de agradecer.

Echamos una mirada atrás ¿Cómo definiría a Javier Pérez presidente?

Como un hombre que se supo adaptar a las circunstancias en cada momento. Un hombre muy inteligente, muy hábil, que son capacidades que se necesitan. Y un hombre fundamentalmente honesto y valiente en todas sus decisiones. Al final pudo conseguir lo que él tanto soñaba. Tenía el sueño de hacer al Tenerife grande y, al final, con la ayuda de todos, lo logró.

¿La reconocen en el Estadio? ¿Qué le dicen de él?

A veces no me reconocen como su viuda, pero los comentarios que escucho sobre él en el Estadio siempre son buenos. Es normal que se comente que hizo cosas buenas y otras que no le salieron bien, pero me lo recuerdan con mucho cariño.