Álvaro Cervera asumió con resignación que el 0-0 fue un resultado "normal" en un encuentro como el de ayer. "Jugando en casa, sabe a poco", reconoció antes de apuntar que no le disgustó el partido.

El técnico señaló que "las defensas estuvieron bien" y que "fue imposible crear ocasiones seguidas". Por otro lado, se mostró conforme con la otra parte del trabajo del Tenerife. "Limitamos a un rival que llevaba diez jornadas sin perder a realizar dos tiros desde fuera del área", dijo para añadir que fue la escuadra local la que logró que el adversario no pudiera presionar donde más le gusta. "Los metimos más atrás", explicó.

En general, no se quedó con la impresión de que el Tenerife fuera poco ambicioso. "Después de entrar al vestuario, no tengo la sensación de que nos dejáramos algo. Usamos las armas de siempre, pero seguramente el rival lo hizo mejor".

En cuanto al debut de Dani, comentó que el portero estuvo "bien y tranquilo", y aclaró que se decantó por él porque "fue la mejor opción para el equipo". Por otra parte, confesó que no habló con Roberto para darle a conocer los motivos de esta decisión.

Entretanto, compartió la razón que lo llevó a no darle minutos a Aridane Santana. "Pudimos meterlo, pero el problema era buscar una posición en la que el contrario no nos creara desequilibrios. Pero tampoco estábamos llegando demasiado por las bandas ni metiendo centros para que él luciera su juego. No lo creí oportuno, porque el equipo no estaba mal. Para la gente no fue un partido bonito, pero a mí, como entrenador, no me disgustó. Es verdad que tenemos que generar más, pero limitamos al Numancia a dos tiros desde fuera del área".

A las puertas del inicio de la segunda vuelta, Álvaro no ocultó que la valoración de la primera fase "no es buena", porque esperaba ver "mejor" al Tenerife. "El equipo ha estado un poco renqueante. Nos pasaron muchas cosas que nos lastraron. No estuvimos lo suficientemente tranquilos".

Dentro del mismo balance, reflexionó sobre la pobre estadística anotadora de su equipo. "Somos el menos goleador porque no somos buenos atacando. No lo hacemos como se debe hacer".

Con todo esto, el Tenerife se encuentra ahora más cerca del descenso que de la zona de promoción, y así el equipo "no juega tranquilo ni suelto, lo hace con miedo".

Pasando al mercado de fichajes, fue consultado por la búsqueda de un delantero. "Si viniese alguno acorde a lo que necesitamos, que pueda aprovechar los espacios en velocidad, no estaría de más tenerlo, pero tendría que ser un jugador muy específico. No traeremos a uno para no usarlo".

Por último, advirtió de que no tiene información sobre la probable baja de Ulises Dávila y que no dejó fuera de la convocatoria a Maxi Pérez con el fin de enviarle el mensaje de que no cuenta y que le conviene cambiar de club en enero.