El Tenerife se asoma al abismo. La derrota de ayer empeoró las sensaciones de un equipo agarrotado, superado por los acontecimientos e incapaz de imponer su mayor calidad ante un Albacete que se limitó a explotar sus escasas virtudes y estar más concentrado, agresivo e intenso para llevarse tres puntos importantes en un duelo (ahora mismo) directo. Da igual que el árbitro anulara un gol legal con 3-2 que pudo darle a los insulares al menos un punto.
Esos factores ya no aliviarán un ambiente tan negativo en torno al equipo que amenaza con llevarse por delante no solo al entrenador, sino la continuidad del propio club en el fútbol profesional. Urge cambiar la dinámica. Como sea. Con ausencias destacadas como Moyano, Jorge o Diego Ifrán, Álvaro Cervera inventó un 4-4-2 en el que Quique Rivero y el debutante Juan Carlos ocuparon las bandas. En busca de la velocidad perdida, Suso volvió a la delantera para acompañar a Aridane. El plan pudo irse al traste en los primeros minutos porque el empuje inicial de los locales desembocó en un penalti que lanzó Chumbi al larguero (6'').
El susto desperezó al conjunto canario, con problemas para sujetar las acciones de ataque manchegas por las alas. Pero cuando peor parecía estar el asunto, llegó el 0-1. Una acción aislada por la izquierda acabó en un centro de Albizua que pasó por delante de Aridane, Suso y tres defensas. Quique Rivero, que llegaba por allí, remató solo ante Dorronsoro (13''). Era la mejor noticia posible para el Tenerife que, sin embargo, manejó mal la ventaja en el marcador. Ni supo enfriar el choque con la posesión del balón ni replegarse para cerrar vías de ataque al adversario. No obstante, el empate iba a llegar a balón parado, en un córner regalado por Raúl Cámara. Chumbi, solo en el segundo palo, enganchó una prolongación y empujó a la red a los 22 minutos de partido.
Volver a empezar para los de Cervera, que volvieron a navegar contracorriente. Pero entonces se apreciaron aún más las carencias de uno y otro equipo. El partido se perdió en interrupciones, balonazos y escasas acciones de asociación. En una de ellas, Juan Carlos disparó a portería por primera vez (27''). El inseguro Dorronsoro respondió bien. Mientras el público buscaba resguardarse bajo techo para protegerse de la lluvia y el viento, Albacete y Tenerife exponían todas sus inseguridades para marcharse a los vestuarios dando por bueno el empate a la espera de los segundos 45 minutos. El retorno al césped no pudo resultar peor para los visitantes que, en 14 minutos, encajaron otros dos goles a balón parado. Chumbi (46'') y Pulido (59'') hurgaron en la herida de un Tenerife dispuesto a dispararse en el pie una semana más. Unas veces es una cosa y otras veces, otra. Pero el caso es que lleva cinco jornadas sin ganar. Con todo en contra, Cervera dio entrada a Cristo González.
Seguramente para ver si algo pasaba que cambiara la dinámica. Y pasó. El chico encontró un balón suelto en el área y definió con el talento natural del que dispone. Dorronsoro nada pudo hacer ante la vaselina del canterano (68''). El miedo cambió entonces de acera y los locales se refugiaron cerca de su área perdiendo la posesión. Empujó la escuadra tinerfeña con más corazón que cabeza y, a falta de once minutos para el final, encontró el premio. Carlos Ruiz recibió en una segunda jugada solo ante Dorronsoro y remató a la red. El asistente levantó la bandera para avisar al colegiado de un inexistente fuera de juego. Protestaron los de Cervera sin éxito. Y lo siguieron intentando, pero con la falta de acierto habitual. Tampoco ayudó el técnico, puesto que la entrada de Víctor García y Ricardo restó más que sumar a un equipo necesitado de atrevimiento. El Albacete aguantó como pudo y sumó tres puntos que, pese a las dificultades y los errores, le enseñan el camino para salvarse.
3-2
albacete-tenerife
Albacete: Dorronsoro (1); Antoñito (1), Gonzalo (1), Pulido (1), Paredes (1); Mario (1), Miguel Núñez (1); Keko (2), Samu (1), Portu (1); y Chumbi (2). En el minuto 70, Jorge Díaz (1) entró por Samu; en el 75, César Díaz (1) por Keko; y en el 79, Rubén Cruz (sc) por Chumbi.
CD Tenerife: Dani Hernández; Raúl Cámara, Hugo Álvarez, Carlos Ruiz, Albizua; Rivero, Vitolo, Aitor Sanz; Suso, Juan Carlos y Aridane. Además, Cristo González sustituyó a Aridane (59''); Víctor García ocupó el lugar de Raúl Cámara y Ricardo el de Juan Carlos (83'').
Árbitro: Óliver de la Fuente Ramos (1), del Comité Territorial Castellano-leonés, asistido por Sánchez Fernández y Pescador Hernández. Anuló un gol de Carlos Ruiz por un fuera de juego inexistente (79''). Amonestó a Samu (28'') y Pulido (64'') por los locales y a Rivero y Aitor Sanz en los visitantes.
Goles: 0-1, m. 13: Rivero remata, libre de marca en el segundo palo, un centro de Albizua desde la izquierda. 1-1, m. 22: Córner prolongado al segundo palo que empuja a la red Chumbi. 2-1, m. 46: Córner que remata Chumbi ante la pasividad defensiva visitante. 3-1, m. 59: Córner que cabecea en el segundo palo Pulido, tras un centro de Antoñito. 3-2, m. 68: Cristo González, de vaselina.
Incidencias: Encuentro de la vigésimo tercera jornada del Campeonato Nacional de Segunda División A, Liga Adelante, disputado en el estadio Carlos Belmonte ante unos 9.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de los fallecidos en el accidente aéreo del pasado miércoles en la Base Aérea de Los Llanos. El Tenerife lució su tercera indumentaria, negra y fucsia. El consejero Corviniano Clavijo y el secretario técnico Alfonso Serrano representaron al club insular en el palco.