94-85

real madrid fc iberostar tenerife

Real Madrid: Rivers (6), Rudy Fernández (19), Felipe Reyes (15), Sergio Rodríguez (17), Gustavo Ayón (9) -inicial-, Campazzo (2), Maciulis (3), Caroll (9), Llull (10), Bourousis (2) y Slaughter (2).

Iberostar Tenerife: Richotti (21) Ricardo Úriz (5), Javier Beirán (4), Levi Rost (5), Sikma(22) -inicial-, Heras(-), Lampropoulos(13), Saúl Blanco (2) y San Miguel (13).

Árbitros: García González, Castillo y Mas Cagide. Pitaron antideportiva a Sergio Rodríguez y técnicas a Maciulis y a Sikma. Eliminados: Rost y Sikma.

Incidencias: Pabellón Barclaycard Center. Presencia de 9.231 espectadores. El Real Madrid brindó el trofeo de campeón de la Copa del Rey a su afición, con el Iberostar Tenerife haciéndole el pasillo de honor. En el tercer cuarto fue homenajeado el equipo infantil, campeón de la Minicopa Endesa 2015. Presencia en el palco de Félix Hernández, presidente aurinegro, junto a Florentino Pérez.

Plantó cara el Iberostar Tenerife hasta el final en un partido de máxima igualdad, pero en el último tramo el Real Madrid fue superior. Buena actuación de Sikma y Richotti (22 puntos y 12 de valoración; 21 puntos y 21 de valoración, respectivamente), además de la extraordinaria labor defensiva y en el rebote de Javier Beirán, que se fue hasta las 15 capturas.

El Real Madrid apretó al final y cuando lo hace es raro que se le escape la victoria. Su tercer cuarto, anotando 32 puntos, fue determinante para abrir brecha en el electrónico ante un batallador Iberostar Tenerife, que sigue resultándole incómodo a los de Laso.

Rudy y Sergio Rodríguez comandaron el triunfo de los blancos, ante los que no pudieron hacer nada los discípulos de Alejandro Martínez, que seguirán una jornada más con diez victorias en la zona templada de la clasificación de la Liga Endesa, mirando más hacia los "play-off" que a las dos plazas de descenso.

Tras el parón de Copa, la competición volvía a ponerse en marcha. El Iberostar Tenerife tenía tras el parón uno de los platos más fuertes de la temporada. Los blancos, con la moral por las nubes tras alzarse con la Copa del Rey y la victoria conseguida en la Euroliga ante el Estrella Roja, vieron ante sus ojos a un rival muy incómodo.

Además, el conjunto canario debía tener presente el complicado calendario de los capitalinos por si el cansancio apareciese en un momento dado. Ello no ocurrió por la amplitud de plantilla y sucedió todo lo contrario. Eso sí, el conjunto de Alejandro Martínez venía dispuesto a plantar cara a los madridistas y así lo demostró pese a la derrota.

El partido se presentaba muy igualado. El primer acto finalizó con un parcial de (25-26) a favor de los insulares. Gran protagonismo de Sikma (9 puntos) y Richotti (10 puntos) que tiraron del equipo en los primeros compases del choque. Iberostar Tenerife salió a la pista del Barclaycard sin complejos y jugar de tú a tú a este Real Madrid, al que hay que hacer tantos puntos si quieres seguirle el ritmo.

El segundo período comenzó con un pequeño bajón de los tinerfeños. Un triple de Carroll daba ventaja a los suyos en el marcador (31-26). No tardaron en sobreponerse gracias a Sikma y al italo-argentino Richotti con sendos triples que darían un empujón al equipo.

El norteamericano estaba en racha, otro triple y una gran jugada con Richotti -la asistencia del 43 arrancó los aplausos de la grada- dieron la vuelta al marcador (39-44).

Antes del descanso, Llull acortó distancias pero el Iberostar seguiría por delante y se retiró al vestuario con dos tantos arriba (46-48), para alegría de la veintena de canarios que presenciaron este encuentros desde las gradas del Barclaycard Center. Los hombres de Alejandro Martínez estaban poniendo en apuros al Real Madrid, aunque en ese instante la pregunta era clara: ¿Podrán los aurinegros aguantar este extraordinario ritmo y acierto en los segundos 2o minutos?...

Y el Real Madrid respondió muy pronto a esa interrogante al protagonizar la remontada, marchándose primero con seis tantos y cerrar el tercer parcial con 6 arriba (78-72), diferencia que seguía haciendo feliz a los canaristas, sobre todo al tratar de tú a tú al poderoso campeón de la Copa del Rey y actual líder en la Euroliga.

La magia del "Chacho" y el acierto desde el 6,75 de Rudy Fernández fueron claves. Desplegó su mejor versión y obtuvo gran acierto en triples. Importantísimo el conseguido en el minuto 26 que daba alas a los suyos.

Si el Iberostar Tenerife no tenía suficiente con el vendaval mallorquín, las canastas decisivas de Felipe Reyes hacían que los madrileños se pusieran por delante y anulasen el buen bagaje ofensivo que seguían poseyendo los del Santiago Martín. Cuando el poderoso adversario se puso por delante, no hubo vuelta de hoja, la ventaja local seguiría hasta el final

El último cuarto sirvió para que los locales abrieran una brecha todavía más notable, jugando ya por encima de la decena de puntos.

Llull apareció con un triple (81-72), que vislumbraba un difícil final para el Iberostar Tenerife, que parecía más agotado psicológica que físicamente, por el hecho de haber hecho un gran partido y llegar a la parte definitoria sin fuelle. Rudy también se animaba con otro triple en el minuto 33.

Sin embargo, el equipo de Alejandro Martínez luchó hasta el final, o al menos, hasta que pudo. Sikma lo intentaba y acercaba al equipo a diez puntos. Un espejismo. A falta de tres minutos, el marcador reflejaba el 90-78, inalcanzable ya para el Iberostar Tenerife, condenado a una derrota esperada.

En baloncesto nos fijamos principalmente en las anotaciones. Miras las estadísticas y elogiamos los 22 y 21 puntos de Luke Sikma y Nicolás Richotti. Y tienen su mérito llegar a esos guarismos cuando delante tienes a jugadores de primerísimo nivel y con sueldos millonarios. Pero no lo es todo. Por eso hay que aplaudir y felicitar a Javier Beirán por su papel defensivo, como el de la gran mayoría de sus compañeros, pero sobre todo por su poderío reboteador, capturando la friolera de 15, quizás lo que le hubiese correspondido a Sekulic si estuviera en pista.

El 33, como Levi Rost, ayudó de manera brillante a Sikma y al renqueante Fotis bajo los aros.

Mención especial, por justicia, para los bases Úriz y San Miguel, este en su partido 300. Lo hicieron francamente bien, pero parar al "Chacho" es mucho.