La temporada de la liga china de fútbol arranca mañana, sábado, con Fabio Cannavaro como nuevo entrenador del vigente campeón (Guangzhou Evergrande) y el morbo de ver si otros dos viejos conocidos del fútbol español, Gregorio Manzano y Cosmin Contra, podrán desde sus banquillos hacerle sombra.

El exjugador italiano del Real Madrid y el rumano Contra, "arrebatado" al Getafe en enero por el Guangzhou R&F, son las dos novedades más llamativas de una liga china que este año ha gastado más que nunca en fichajes (unos 100 millones de euros), aunque las caras más conocidas no estarán en el césped, sino en el banquillo.

Un año más, el Guangzhou Evergrande, campeón de las cuatro anteriores temporadas, será el máximo favorito al título, aunque esta vez afronta la dificultad de un forzado cambio de entrenador, ya que el anterior, Marcello Lippi, que consiguió con el equipo tres ligas y una Champions League asiática, decidió jubilarse.

Su antigua mano derecha en la selección italiana que ganó el Mundial 2006, Fabio Cannavaro, ha sido el escogido para intentar mantener el imperio del Evergrande, que para esta temporada además ha perdido a los dos transalpinos que jugaron en sus filas el año pasado, Alberto Gilardino y Alessandro Diamanti.

Les sustituirán dos fichajes brasileños que han causado un terremoto en la liga de su país, Ricardo Goulart y Alan Carvalho, en los que el equipo cantonés ha gastado 15 y 11 millones de euros, respectivamente, convirtiéndoles en los dos fichajes más caros de la historia de la liga china.

Goulart, habitual en la selección de Dunga y uno de los jugadores más destacados el año pasado en el campeonato liguero del Cruzeiro, será el líder de uno de los equipos más fuertes de Asia.

Sobre el papel, el máximo candidato a luchar por la liga contra el Evergrande será el Beijing Guoan, entrenado desde la pasada temporada por el español Gregorio Manzano, quien el pasado año estuvo a punto de dar la gran sorpresa y batir a los cantoneses y llegar a la última jornada con posibilidades, aunque el club pequinés se tuvo que conformar con el subcampeonato.

El entrenador jienense, que el año pasado fue elegido como el mejor técnico de la temporada en China, ha optado por mantener prácticamente la misma plantilla de 2014, con el argentino Pablo Batalla, el croata Matic y el montenegrino Damjanovic como principales referencias.

También se espera mucha guerra por parte del Guangzhou R&F, el rival local del Evergrande en la ciudad de Cantón, que quedó tercero en la pasada temporada y este año ha fichado a Cosmin Contra para suplir la marcha de su banquillo del veterano Sven Goran Eriksson, fichado en el mercado invernal por otro de los grandes clubes chinos, Shanghai East Asia.

Otra novedad del Guangzhou R&F será el centrocampista Míchel Herrero, también procedente del Getafe (uno de los equipos a los que la pretemporada china, que es en invierno, ha trastocado más los planes) y que será por ahora el único jugador español que juegue en la liga china esta temporada.

Estuvo a punto de seguir el mismo camino Sergio García, capitán y líder del Espanyol, a quien un equipo de la segunda división china (el Hebei Fortune, entrenado por Radomir Antic) le ofreció 20 millones de euros por dos temporadas y media, una tentación que el internacional español rechazó el pasado mes.

Otro Sergio de raíces españolas, Sergio Escudero (nacido en Granada de padres argentinos pero que en 2007 se nacionalizó japonés), militará a partir de esta temporada en un equipo chino, el Jiangsu Guoxin.

La leyenda del fútbol australiano Tim Cahill, que ha sido fichado por el Shanghai Shenhua, el internacional brasileño Diego Tardelli, en las filas del Shandong Luneng, o el venezolano Mario Rondón, en el recién ascendido Shijiazhuang Ever Bright, son otras destacadas novedades de la nueva temporada en China, que se juega de marzo a noviembre.

Latinoamérica, sobre todo Brasil, se confirma un año más como la principal cantera de extranjeros: 22 de ellos, más de la tercera parte del total, son jugadores brasileños, mientras que habrá un venezolano, dos colombianos, un boliviano y cinco argentinos.

Entre esos cinco futbolistas del Cono Sur destacará el esperado regreso al fútbol chino de Darío Conca, quien durante años fue la gran estrella del Guangzhou Evergrande.

En 2014, después de tres años de triunfos en Cantón, Conca regresó al Fluminense brasileño, donde ya había jugado entre 2008 y 2011, pero no consiguió readaptarse con éxito y en 2015 vuelve como un "hijo pródigo" al país oriental, esta vez en el Shanghai East Asia de Eriksson, otro posible candidato al título.