El alemán Sebastian Vettel logró ayer para Ferrari la victoria en el Gran Premio de Malasia, segunda prueba del Mundial de Fórmula Uno, tras someter en la pista de Sepang a los poderosos Mercedes del británico Lewis Hamilton y el alemán Nico Rosberg, que lo acompañaron en el podio.

Ferrari no ganaba una carrera desde el 12 de mayo de 2013, cuando Fernando Alonso, ahora en McLaren-Honda y que tuvo que abandonar la carrera en Sepang, se impuso en el Circuito de Barcelona-Cataluña. Ha transcurrido un año, diez meses y 17 días desde ese lejano triunfo.

Vettel, además, llevaba 35 carreras sin estar en lo más alto de un podio, desde que como piloto de Red Bull ganó el Gran Premio de Brasil de 2013. El germano logró en Sepang su 40ª victoria en el Mundial, con lo que se queda a una del legendario piloto brasileño Ayrton Senna. El germano es el trigésimo octavo piloto que logra una victoria como piloto de Ferrari.

El finlandés Kimi Raikkonen, que incluso tuvo un pinchazo en la primera vuelta, logró remontar para colocar el segundo Ferrari en la cuarta plaza. Como escuchó Vettel por radio nada más cruzar la línea de meta, "Ferrari ha vuelto".

La decisión de su equipo de permanecer en pista durante la salida del coche de seguridad, por un accidente del sueco Marcus Ericsson (Sauber) en la cuarta vuelta, resultó ser la acertada. El germano completó una estrategia de dos paradas por las tres que hicieron las dos Flechas de Plata.

Los Mercedes sí optaron por entrar en la calle de garajes con la salida del "safety car" para cambiar los neumáticos, algo que al final lastró sus opciones. Vettel siempre estuvo en ventaja y los Mercedes no dieron con el ritmo necesario para discutirle el triunfo al alemán. Hamilton sigue al frente del Mundial con 43 puntos, tres más que Vettel y diez por delante de Rosberg.

Fernando Alonso, que disputaba su primera carrera, tuvo que abandonar por un problema mecánico (sistema de refrigeración del ERS) en la vuelta 22 de las 56 de que constó la carrera. Vio ya sin el casco como ganaba un coche del equipo en el que estuvo cinco temporadas. Su compañero, el británico Jenson Button, tampoco pudo acabar, en su caso por un fallo en el turbo, para confirmar las carencias de los McLaren-Honda.

El español Carlos Sainz (Toro Rosso-Renault) se clasificó en la octava plaza, una por delante de la que hace dos semanas ocupó en Melbourne en su primera carrera en Fórmula Uno. Esta vez lo superó por una plaza su compañero, Max Verstappen, pero volvió a dar muestras de su calidad.

En su primera carrera como piloto de Fórmula Uno el también español Roberto Merhi (Manor-Ferrari) logró su objetivo de cruzar la línea de meta. Fue en la decimoquinta y última plaza, a cinco vueltas del ganador, pero con el coche más lento de la parrilla. La próxima carrera del Mundial será el Gran Premio de China, en el circuito de Shanghái el 12 de abril.