Molesto por tener que dejar de jugar la próxima jornada, pero con la conciencia tranquila, ya que sostiene que la decisión de Juan Manuel López Amaya de expulsarlo con doble tarjeta amarilla, a la finalización del partido del pasado domingo ante el Real Zaragoza, fue exagerada.

El inesperado desenlace se produjo, según indicó el colegiado en el acta, por las protestas del futbolista, primero en el césped y luego en el túnel de vestuarios. En concreto, López Amaya revela que Vitolo se dirigió al cuarto árbitro, a viva voz, para exclamar: "Siempre sois los mismos, siempre es lo mismo". El protagonista ofreció su versión después del entrenamiento de ayer.

"En el acta queda reflejado claramente que no hubo ni insultos ni falta de respeto", advirtió calificando la expulsión de "exagerada", ya que "no hubo ni un sinvergüenza ni un qué malo eres". Es más, el de Valleseco apuntó que López Amaya no trasladó al informe con exactitud lo que realmente le comentó en el campo. "Como canario que soy, no me dirijo a nadie diciendo vosotros sois, porque aquí no se usa eso".

Vitolo confesó que nunca le había pasado algo igual y trató de encontrar alguna explicación sospechando que el colegiado granadino "quizás estuvo un poco nervioso y vio que la gente no se había ido contenta con su trabajo, pero tampoco puede escribir algo que no es real".

Además, aseguró que no se arrepiente de lo que hizo, principalmente porque en todo momento fue respetuoso con López Amaya. "Cuando le comenté que siempre es lo mismo, me referí a a que siempre hay un error que nos cuesta sumar puntos. Pero se lo dije con todo el respeto del mundo. No hubo falta de respeto. Y si alguien me dice que no debí comentarle nada, respondo que somos personas y que no lo hice con mala intención. Lo volvería a hacer", aclaró el futbolista.